Diario de Marcha del Coronel Belgrano a Rosario, 1 5 días de los meses de Enero y Febrero de 1812
Presertación en el INSTITUTO BELGRANIANO DE ROSARIO. 02 de Julio del 2016.
1.- Introducción.
El
texto que transcribo, (soy recopilador de datos), fue comentado y anotado por el eminente historiador Dr.
Ernesto J. Fitte, quien fuera Miembro de Número de la Academia Nacional de la
Historia y del Instituto Belgraniano de Buenos Aires”, en Cuaderno de
Investigación Histórica publicado por el I. N. B. el año 1995, con el Prólogo
del Prof. Anííbal Jorge Luzuriaga, Presidente del Instituto Nacional
Belgraniano, en ese momento.
Esta publicación está destinada a los docentes de Historia y Ciencias Sociales, que no posean el texto entero, pues desde el Instituto Belgraniano Rosario, procuramos difundir las ideas y acciones del General Manuel Belgrano.
El Diario de Marcha escrito por nuestro prócer Manuel
Belgrano abarca desde el día 24 de Enero, al 07 de febrero del año 1812. Este documento en el que Belgrano, con una cuidada
caligrafía, da cuenta con gran detalle de las peripecias de la marcha. de los
milicianos.
"Esos 15 días inolvidables desde Buenos Aires a
Rosario fueron escritos (para nosotros) por este heroico abogado y militar, en
un cuaderno donde describe las tareas realizadas a diario, los aspectos físicos
y geológicos del territorio, las características sociales, económicas y religiosas
de las personas, que encontraron a su paso las tropas que comandaba. Esta tropa
sufría el calor del verano, la falta de agua, la comida racionada, el descanso
bajo la carpa en el suelo, la higiene del cuerpo y de la ropa cuando
encontraban un curso de agua abundante y la acumulación del cansancio".
Este escrito que nos revive aquellas acciones y
vivencias, fue pensado por la mente de un estadista, que programaba el
futuro, de un periodista deseoso de comunicar esta acción patriótica, gesta que
llegaría a los confines de la Patria asegurando sus fronteras, liberándolas de
la rapiña extranjera y colocando los firmes mojones de su existencia.
Este documento belgraniano nos permitió conocer
detalles de los pueblos con sus caseríos, comarcas, campos con sus labradores,
pioneros del crecimiento argentino, que vivían autoabastecidos, sin esperar
ningún regalo, se hubieron perdido para siempre.
2..- Historia del Regimiento de Patricios.
Durante la Revolución de Mayo, los
Patricios y su comandante Saavedra desempeñaron un papel importantíísimo, sobre
todo como fuerza disuasoria. La Revolución de Mayo se produjo en el momento
elegido por Saavedra y pasó a presidir la Primera Junta de Mayo de 1810
El 16 de noviembre de 1811 los
regimientos 1 y 2 fueron unidos, pasando a ser el N° 1 de Patricios, y asumió
su jefatura el coronel Manuel Belgrano.
Las palabras de Belgrano al gobierno al ser
designado jefe del Regimiento Uno de infantería Patricios fueron: “Procuraré
hacerme digno de llamarme hijo de la Patria”.
3.- El Motín de las Trenzas.
El 6 de diciembre de 1811 sus
hombres protagonizaron el llamado Motín de las Trenzas, en contra de su nuevo
jefe, reclamando conservar su autonomía y el privilegio de elegir a sus
comandantes, levantándose contra el Primer Triunvirato. Luego de sofocada esta
rebelión, el Regimiento pasó a ser "de línea", y sus soldados fueron
“condenados a servir en él por muchos años y otros se les aplicó la disciplina
militar. Varios Sargentos Cabos y Soldados fueron fusilados el 10 de Diciembre de 1811 en la Plaza de la Victoria,; con este hecho se inicia una Guerra Civil que duraría 60 años" . (Gaceta de Bs.As.-10-12-1811).
El Poder Ejecutivo de esos años, el
Triunvirato, tenía informes que los realistas proyectaban una incursión por el
Río Paraná, hacia el Norte, con el fin de sorprender alguna población del
litoral. Urgidos por este informe los Triunviros, pensaron enviar “una
Fuerza Expedicionaria que custodiase las poblaciones que se hallaban a lo largo
del Río Paraná”.
El Triunvirato con sano criterio “pensó
poner en acción a los integrantes de ese Regimiento, arrancándolos del foco de
las intrigas y restableciendo el espíritu militar”. El Coronel
Manuel Belgrano recibió las órdenes” para que aliste a su Regimiento con
los elementos necesarios para emprender la campaña “Defensa del Litoral”. Fue
para él un inmenso desafío pues algunos de los integrantes estaban “fugados, fueron
desertores , o transferidos a otros cuerpos y el resto que permanecían en el
Regimiento sufrían un desquiciamiento moral y carecían de elementos
necesario para su funcionamiento, próximo a disolverse”.(AGN. 1812).
4.- Manuel Belgrano recibió la orden de
custodiar el Río Paraná hacia el Norte.
El Coronel Manuel Belgrano comenzó
por “levantar la moral” y con el pensamiento puesto en el
reaprovisionamiento. El 13 de Enero de 1812, Belgrano recibió “un aviso
que le fijaba fecha de partida, dentro de tres días , con el Regimiento a su cargo
rumbo a la Bajada de Santa Fe”. El mismo día Belgrano puso en conocimiento al
Jefe del Estado Mayor Don Francisco Javier de Viana que “para su cumplimiento
debía proveérsele previamente de las necesarias prendas vestuarias, de
las mochilas que faltan, de las municiones competentes, según el objeto de mi
marcha y en el caso de ser a caballo o en carros, de las monturas y el número
suficiente de estos últimos transportes, las tiendas de campaña , un bote de
tres o cuatro remos por banda que deberá conducirse en ruedas, haya el
camino que fuere”. (A.G.N.-1812- X.3 10, 3).
5.- Preparativos para el itinerario de la Marcha hacia
Rosario.
El Coronel Manuel Belgrano solicitó “que
la Superioridad le señalase el itinerario a seguir y que por anticipado
se advirtiese a los Comandantes o Jueces de las distintas localidades que
atravesaría la columna, a fin que se le tuviese preparada carne y leña a su
justo precio, sin olvidar la indicación si el gasto lo abonaría el erario
o sería pagado por cuenta de la tropa”. (Ibid.)
La respuesta que e dio el Comando fue “que la marcha
se efectuaría a pie, debiendo calcularse para cada soldado una dotación e 200
tiros”. En cuando al resto de los pertrechos solicitados, le era
requerido “que elevase la pertinente nómina”.
El día 14 de Enero de 1812, fueron entregados al
Subteniente José Roxo, 500 fusiles, lo cual nos permite estimar en menos de
medio millar los efectivos del cuerpo. A los pocos días se completaba con
100.000 cartuchos a bala y 2.000 piedras a chispa”.
“Para el alojamiento de los soldados, oficiales
y suboficiales, en los campamentos le fueron entregadas 40 tiendas de campaña,
en forma de pabellones.
Los soldados cubrirían el trayecto caminando, para la
oficialidad superior se autorizó hacerlo a caballo para ello se ordenó el
suministro de ocho monturas completas”.
Los elementos accesorios que pidió Manuel Belgrano
antes de la partida, “obtuvo 9 ollas grandes, 12 azadas y otras tantas hachas y
362 chifles”. El transporte de todo el material descripto “fue cargado en 16 carretas
adquiridas especialmente que costaron 40 pesos cada una según factura del
vendedor”. (Ibid).
El Coronel Belgrano “realizó el viaje en un carruaje
con aperos, utensilios, más un criado encargado, cuyo dueño era Roque
Jacinto Pintos, quien alquiló la volanta hasta la Capilla del Rosario”. En una
de las carretas “viajaba un protomédico, Don Martín Rivero con un botiquín y
una caja de cirujía, para que atendiese cualquier urgencia, enfermos o
heridos”. La provisión de medicamentos solicitados por el Coronel
Belgrano “comprendía un surtido de jeringas, potes, sales, ungüentos,
emplastos, rollos de vendas, que recién fueron completados algunos
elementos, enviados por la Intendencia Militar, cuando la expedición estaba
acampada en San José de Flores”. (A.G.N. Ibidem. Cajas de Bs. As.. Enero de 1812).
El 22 de Enero “Belgrano requirió que se arreglara
previamente el tema económico para la tropa, aquellos hombres que salían a la
campaña con un destino incierto, no podían dejar Buenos Aires, mientras no se
les hubiese abonado la paga atrasada”. A la tropa se le adeudaba la última
mensualidad y Belgrano “entendía que era justo socorrer primero a quien va a
sufrir los trabajos de la campaña”. Luego de este requerimiento dos días antes
de la partida “fue satisfecho sin dilación alguna, o sea que el mismo 22 de
Enero el Habilitado del Regimiento 5, recibió para saldar la deuda
correspondiente al mes de Diciembre la suma de 13.500 pesos”. (Según datos de
la época “un Coronel ganaba menos de 240 pesos mensuales, un Capitán 80 pesos,
y los soldados no alcanzaban a percibir 14, siendo de infantería”. (Ibid.
S.III, -1-5-9- Cajas de Bs. As. 1812).
El 23 de Enero, el Coronel Belgrano y sus ayudantes
“la víspera de la salida repasaban y repasaban el listado de los nombres de los
integrantes de la tropa, los pertrechos solicitados, los entregados y los
faltantes. En tal sentido Belgrano se excusaba ante el jefe del Estado Mayor,
“no serle posible el envío del libro de los Servicios con la lista de los
oficiales y agregados junto con la del personal subalterno, por encontrarse la
mayoría sumamente atareada en estos momentos, verificando si se aplicaban las
órdenes dadas para la organización de la marcha. Corresponde señalar que entre
ellas que los oficiales solo llevasen una maleta de equipaje, y la tropa su
mochila”. Belgrano con dolor declaraba que “como el Regimiento de mi cargo no
la tiene, no me es posible hacerla cumplir por atrasos en el
aprovisionamiento”. ( Ibidem.AGN.- S. X. 3-10-3).
El 24 de Enero de 1812, al anochecer el Regimiento
emprendió el camino a Rosario. La razón era que en el día el verano calcinaba y
buscaban la sombra. Las personas y los animales marchaban tranquilos por la
noche, con una temperatura agradable.
El Diario de Marcha del Coronel Manuel Belgrano,
de su puño y letra.
1.- El Diario de Marcha del Coronel
Manuel Belgrano, nos acerca a los momentos que vivió y a su intenso deseo de
difundir la gesta patriótica que iniciaba, al mando de un Regimiento que tenía
el encargo de frenar el avance realista que asolaba las costas del Río Paraná.
2.- Este pasado histórico trascendental
en la Historia Argentina nos llega desde el día en que ocho carillas
manuscritas, fueron descubiertas por el prestigioso locutor radial,
animador televisivo, periodista y actor, Antonio Carrizzo, quien las adquirió en una subasta pública. “Cuando oyó el
anuncio del rematador que ese escrito era atribuido a Manuel Belgrano, despertó
su interés y lo atrapó de tal forma que adquirió esas carillas, sin
pensar en el precio”.
Antonio Carrozzi Abascal, más conocido como Antonio Carrizo, nació
el 15 de Septiembre de 1926 en General Villegas, Provincia de Buenos
Aires y falleció el 1 de Enero del 2016, (89 años), en la ciudad de
Buenos Aires. Su perfil: “fue lector voraz,
cálido, entrañable y encendido divulgador de las manifestaciones históricas y
culturales argentinas, como La vida y el Canto”.
3. -“Esas ocho carillas halladas y rescatadas
afortunadamente por Antonio Carrizo Abascal, fueron autenticadas por la
Academia Nacional de la Historia”. Esa adquisición develó el dato
histórico: “la existencia del Diario de la Marcha de Buenos Aires a Rosario,
escrito por el Coronel Manuel Belgrano, entre el 24 de Enero al 7 de
Febrero de 1812”.
4.- Los datos que nos aportó el abogado
Manuel Belgrano, Militar, Economista, Creador de Escuelas y Periodista, fueron escritos por la
noche, a la luz de un candil, en el escritorio de su volanta, o cuando hacían
un alto en el camino, pues durante el día, su carruaje se habría movido,
ajetreado bastante con el camino desparejo.
El día 24 de Enero de 1812.
“En la mañana de este día se cargaron
las diez y seis carretas que se nos señalaron con las municiones, tiendas de
campaña y útiles de las diez compañías del Regimiento y asimismo la Caja
de los caudales y la de Capilla en el mejor orden posible, dejando señalada la
hora a la 4 de la tarde para la reunión de la tropa en el Cuartel a fin de
emprender la Marcha.
A la expresada hora se tocó a Asamblea y
después de darse las providencias oportunas y repartir los chifles que se
adoptaron para cantinas, se puso en marcha el Regimiento a las 5 y ½ con
destino a San José de Flores para donde había mandado las carretas en la mañana
y a cuyo punto ordené que se llevase el ganado y que el Subteniente Anglada a
quien di orden de que se adelantase, buscara la leña suficiente para
cuando llegásemos, asimismo mandé al Capitán Forest con el Cadete Díaz
para que delinease el campamento a fin de que la tropa levantase Las
tiendas luego que llegase al punto.
Siguiendo la marcha hicimos alto en los
Corrales de Miserere para que se proveyese la tropa de agua y tomase aliento;
allí fuimos bien recibidos por el Rvdo. Padre Fray Viera quien está a cargo del
Hospicio de los Padres Mercedarios y después de una media hora de descanso
continuamos la marcha hasta el Campamento de San José; el camino en la mayor
parte es bueno, pero tiene pasos que en tiempos de agua debe ser intransitables
para marchar a pie.
A las 9 de la noche llegamos al punto
indicado y habiéndose mandado formar en batalla se dieron las órdenes de que
por Compañías señalase cada Capitán los que habrán de ir a levantar las
tiendas, se previno que los fogones se establecieran a sotavento del Campamento
y se mandó formar la guardia de prevención situándola en el punto que se
conceptuó más aparente dándole la orden de que se estableciese centinelas
al redor (sic) del Campamento que no deberían permitir saliera alguna persona
de él, sin previo permiso mío.
Levantadas las tiendas y recogido a ellas,
las Compañías, por su orden, luego que cenaron se tocó la retreta y todo
permaneció tranquilo. Se mataron 8 reses.
San Martín de Tours. Cnstancia.
Día 25 de Enero del 1812.
No siendo posible continuar la marcha
por deberse tomar varias disposiciones para el mejor arreglo de ella, mandé que
la tropa trabajase por el espacio de una hora, y concluido repartí los
Quadernitos de las Obligaciones del Soldado, etc, para que se lean en las
Compañías en los ratos que los permita el servicio; y se dispuso que se trajera
el ganado para que comiera la tropa.
Este punto presenta buenas proporciones
para campar, sin embargo de que el agua es de los pozos que tienen los vecinos
bastante regular; y de que la leña solo puede obtenerse de los acopios que
ellos mismos hacen; también podría servir para situar una gran guardia que con
observación por todos los caminos que se hallan a pocas distancias y los que
vienen a incidir en él, averiguase el Gefe las clases de personas que entran y
salen en la Capital de cuya noticia se carece con bastante detrimento de la
buena policía.
El pueblo empieza a formarse; la Iglesia
aún no está concluida; su largo 20 varas, ancho 8 y ½; a las cercanías de ella
has y 16 a 20 familias; son contados los edificios que hay de material; a las
inmediaciones hay quintas pertenecientes a vecinos de la Capital con plantíos
de duraznos y algunas huertas; según se me ha instruido el Curato tiene legua y
¾ de jurisdicción y los feligreses que la ocupan son 1700; bautismos 180 al año
y casamientos 20, es de admirar que la población no está ni en razón de 10 a 1
con los bautismos. El Alcalde Don Juan Pablo Cruz se me presentó avisándome que
tenía orden del Excelentísimo Gobierno para auxiliarme en lo
que fuese necesario y se me ofreció. Igual oferta me ha hecho el Señor Cura Don
Miguel García
A las 4 de la tarde di la orden de
marcha y en esa hora recibí tres oficios del Señor Gefe del Estado Mayor; dos
de ellos son referentes a las penas impuestas por E. E. a los desertores y
acerca de la mejor disciplina.
Formadas las tropas mandé que
hicieran el círculo y en él les hablé como aparece en el papel número primero y
enseguida la orden acerca de desertores, número segundo de que ya hay
referencias; concluido el acto manifestó la gente su contento con una
aclamación general de ¡ Viva la patria!.
Minutos antes de las seis se marchó, el
camino es excelente y tiene los recursos de agua en los pozos de las casas;
hicimos alto por tres veces en que emplearíamos 3 / 4 de hora
Y llegamos al punto señalado para campar
llamado de la Cañada de Morón, a las inmediaciones de la panadería de Don
Francisco Rodríguez a las 11 de la noche.
Se desplegó en batalla, se señaló la
guardia y levantadas las tiendas la gente cenó y sin más novedad se tocó
la retreta”.
San Pedro Ensenada. Empeño.
Día 26 de Enero del año 1812.
A las cinco de la mañana se tocó a Misa
y formada la tropa en la calle la oyó; luego se mandó retirar a sus tiendas a
descansar; se les proveyó de carne y se dio orden al Capataz de las
Carretas para que a las 3 de la tarde trajese los bueyes a fin de
anticipar su salida con el objeto de que al llegar la tropa se hallase
con las tiendas levantadas.
l punto este tiene agua la suficiente
para beber; hay una cañada que en tiempo de aguas
Se hace intransitable para pasar a pie,
pero se ve un puentecito que sin duda se ha construido por esa necesidad
y es un alivio, en tal caso, para la tropa que marche a pie.
Como a 8 cuadras de distancia al Sur se
halla el pueblo de Morón en donde está el pueblo del Curato; el que según
noticias tiene jurisdicción de Norte a Sur 13 leguas y de Este a Oeste por la
parte menor de 4 a 5 y por la mayor de 6 a 7; contaba en 1810, 3451
feligreses en 520 poblaciones; sus bautismos un año con otro, son
60; las ocupaciones de los habitantes son la labranza y el pastoreo.
Se batieron las tiendas a las tres de la
tarde y nos pusimos en marcha a las 4 y 1 /4 de la tarde para pasar al
Puente Márques. Llegamos a las 7 y 1 / 2 habiendo alto dos veces para dar
alivio a la gente; el tiempo amenazaba; pero felizmente no ocurrió novedad y
mejorada la noche hubo retreta con la música; se cantó el himno patriótico y
todos se retiraron después de un Viva general por la Patria.
De la parte del Este del Río de las
Conchas hacia donde está el puente hay puntos muy ventajosos para defender
aquel; y en lo general son más altas las tierras de dicho lado y presentan
proporciones para defender los pasos, que aunque den Vado, cuando los
tiempos son secos, tienen sin embargo los obstáculos tanto en la bajada como en
la subida por la altura de las barrancas y es indispensable culatear los carros
si no se quiere pasar por el Puente; a esto atribuyo que el camino se haya
alargado más distrayéndolo del Hospicio de los Mercedarios por donde a la
simple vista parece más corto.
Santo Domingo y Soriano. Celo.
Día 27 de Enero del año 1812.
A las 4 de la mañana se tocó la diana;
pero no pudimos ponernos en marcha hasta cerca de las seis por las Carretas;
caminamos hasta la estancia de Álvarez a donde llegamos a las 9; no había más
agua que suministraba el pozo de la casa, (tachado) a poco de haberse sacado se
agotó y solo suministraba lodo líquido; el tiempo se presentó de tormenta; pero
no llovió; toda la campaña que hemos corrido es llana y propia para que
maniobre la caballería; no hay leña, ni agua y el ganado es escaso.
Refrescado el tiempo ordené la marcha
para las 4 y dio principio para las 4 y ½ encontramos algunos malos pasos de
resultas de lluvias y fue preciso hacer deshechos que no fueron menos penosos
por los espinares de que está cubierto el campo.
Llegamos al Campamento de de Cañada de
Escobar a las 9 de la noche después de varias paradas que se hicieron en el
camino; escasez de leña y lodo líquido por agua; sin embargo se cenó y fue
preciso mandar tocar a silencio a las 11.
San Antonio y Candelaria. Valor.
Día 28 de Enero del año 1812.
Antes de la 4 de la mañana se tocó la
diana y a poco rato la generala para batir las tiendas y todos dispuestos nos
pusimos en marcha a las 5 menos ¼; caminos llanos y campos lo mismo; pero
todos cubiertos de espinares que ha sido indispensable hacer la marcha casi
toda en desfilada.
Entramos a la Villa del Luján a las 9 de
la mañana con banderas desplegadas y todo el orden debido y hemos campado
al Oeste del puente; mi atenciones de la parte del Cura Don Francisco Argerich
y del Alcalde Don Estanislao Jos;e Aguirre a quien he pedido 4 carretas para
auxilio del Regimiento que no lleva como acomodar a uno que se enferme y ni
pueden ir los útiles de Compañías en el orden para su mejor seguridad y
prontitud en expedirse.
El Puente y pasos de sus inmediaciones
que he visto pueden sostenerse muy bien; tienen posiciones de provecho y
el Río es barrancos de una y otra parte, la Villa mismo serviría de una
fortificación con bastante utilidad, tiene plaza y sus siete calles las más de
ellas con cercas de tunas bastante altas y espesas. La Iglesia es un
edifico fuerte y de regular arquitectura; el Cabildo es una casa de un alto que
tendrá de 14 a 17 varas de frente con su arquería alta y baja. Los
Bautismo anuales 150 poco más o menos, bien que la jurisdicción es bastante
extensa. El Río está enteramente despoblado de árboles; hay mucha escasez de leña
y se remedia con el cardo asnal seco en su tiempo como el presente; sus aguas
son salobres y solo potables cuando llueve mucho, que es a lo que debe
sus crecientes; pero tiene manantiales en sus riveras
que aunque de agua
gruesa puede beberse; nunca se queda sin agua aun en las mayores secas
atribuyéndose a que las nutrias, de que abundan, con cuevas mantienen
abierto los manantiales, u ojos de agua.
Se dio a la gente descanso y tiempo para
lavarse, sin permitir que pasaran a la Villa más que los escogidos
por las Compañías para que les trajesen lo que necesitaban siendo dos por cada
Compañía que debían ir juntos..
Entre dos y tres de la tarde cayó un
fuerte chubasco que anegó mi tienda y alguna otra; pero sin mayor perjuicio al
ponerse el sol se tocó a la lista, se rezó el Rosario y todos fueron a sus
compañías para cenar; a las 9 se tocó la retreta, y luego incontinenti a
silencio, sin novedad alguna.
En este día he convocado por dos veces a
los Capitanes y Comandantes de Compañías para tratar de la mejor disciplina
para desterrar las inicuas voces así de los Oficiales como de los Soldados, que
ofenden los oídos, para sujetar a los cadetes y hacerlos estudiar, que
son los jóvenes más pillos y más maleducados que he visto y para que por todos
los medios inspiren la subordinación, en Oficiales, Subalternos y tropa y haya
el mejor orden, privando toda especie de juego y cuanto pueda decir a desarreglo.
San Joaquín y Luxan. Espíritu.
Día 29 de Enero del año 1812.
A las 4 de la mañana se tocó generala; y
se levantó el Campamento e inmediatamente nos pusimos en marcha; un extravío de
camino nos ha hecho andar una legua de más y hemos llegado a ese punto de la Posta
de La Cañada de Rocha, cerca de los 9; el so ha sido furioso y se me han
enfermado en la marcha tres hombres; y la más de la gente ha llegado
estropeada; en este punto no hay más agua que la del pozo de la dicha Posta que
puede proveer agua para 800 hombres; no hay cardo para leña; y nos hemos
prevenido de biznaga acopiada en (hay un espacio en blanco), llanuras y más
llanuras sin árboles, ni cosa que se le parezca, si se exceptúan algunos montes
de fruta que hay en una u otra habitación y se ven a largas distancias.
He determinado hacer alto esta tarde
para que la gente tome aliento y se ponga en estado de seguir la marcha mañana.
El mal estado de educación en que están
la mayor parte de los Cadetes del Regimiento me ha obligado a reunir a todos e
imponerles el modo con que se han de conducir imponiéndoles el deber de que
hayan de hayan de estudiar por ahora las obligaciones del Soldado, Cabo y
Sargento de que me han de dar lección todos los días al tiempo que yo llamare.
Se tocó a lista, se rezó el Rosario, se
mudó la guardia y a las 8 y 1 / 2 se tocó la retreta y a silencio sin más
novedad.
San Gregorio y Rosario. Vigilancia.
Día 30 de Enero del año 1812.
A las 2 y 1/ 4 de la mañana se
tocó a diana y a las 3 la generala; a las 3 y 1 / 2 nos pusimos
en marca para llegar con la fresca a este punto de la Cañada de la Cruz dnde
hemos ocupado cuando ya empezaba a calentar el sol el agua es muy gurbia tanto
de la Cañada que la debe a la de las lluvias, como de una laguna grande que
está al lado del camino. Habitación de pájaros y de casi ninguna profundidad;
leña de cardo hay en abundancia en esta estación y tanto que me ha
obligado a situar el Campamento en el mismo camino; como también los carros de
municiones para evitar algún incendio.
En el camino me ha encontrado un
individuo que iba para la posta y me ha entregado un pliego del Señor Jefe de
Estado Mayor en que previniéndome que S. E. ha determinado que me haga cargo
del Mando Militar del Rosario y no altere en punto a fortificar lo dispuesto
por el Teniente Coronel Monasterio, me ordena adelante hacia aquél destino cien
hombres con buenos Oficiales y no siendo posible ejecutar esta disposición,
según la importancia que me hacen concebir mis anticipados conocimientos sobre
ellos, marchando la tropa a pie y que por otra parte los calores son terribles,
ha mandado llamar al Alcalde del Partido para pedirle auxilio sin lo cual es
absolutamente imposible cumplir con la indicada orden.
La distancia de 7 leguas a que estaba el
predicho Alcalde que lo es el de la Hermandad de San Antonio de Areco no le ha
permitido llegar a este punto hasta las tres de la tarde,
Hemos tratado del modo de lograr las
carretas necesarias y le he pedido ocho que hayan de estar en la Posta de Areco
para mañana al ponerse el sol a fin de que se puedan adelantar los cien hombres
arriba expresados.
Al mismo tiempo y conceptuando la
importancia de que las fuerzas que están a mi mando pasen al dicho destino del
Rosario para si se encuentran carretas en el Fortín de Areco, he pasado oficio
al Comandante de aquel puesto para que me proporcione catorce de ellas
ala hora también indicada al Alcalde.
El viento que corre aunque seco, me ha
permitido mandar tocar generala a las 4 y están batiendo las tiendas para
marchar.
A las cinco marchamos y llegamos a la
Cañada de Giles, al punto de ponerse el sol, se pasó lista, se rezó el
Rosario, y establecidas las carretas se levantaron las tiendas se cerró y
tocó a silencio después de la retreta, tuvimos un desertor anoche que venía de
Asistente del cirujano.
El agua de que bebemos es de una
Laguna, y de un pozo de balde que está en una casa inmediata; mucho gasto
hacemos en la manutención y vamos tardando demasiado; lo primero es
indispensable por que debe estar bien mantenido quien marcha a pie y pierde
tanto con el sudor; y lo segundo por el cansancio que trae la fatiga en la
estación y no es posible andar mucho.
San José y Salto. Victoria.
Día 31 de enero del año 1812.
A la 1 y 1 / 2 de la mañana se ha tocado
generala y salimos del Campamento a las 2 y 1 /2 para
aprovechar el fresco que corre y adelantar el camino cuanto sea posible; a las
6 llegamos a ese punto llamado Cañada de Suero; su agua es pésima, y la Casa
más inmediata está a 3/ 4 de legua de distancia sobre el costado derecho del camino.
Mandé ver si había pozo y
felizmente se encontró un manantial de agua regular a donde dispuse que fuera
un carro con los Almacenes de agua para llevar y traernos para proveer a la
tropa; en verdad que el agua es una de las cosas más trabajosas del camino para
la gente y también lo que puede contribuir a alterar su salud o traerle en lo
sucesivo consecuencias fatales a ella.
Los campos aunque son llanos empiezan ya
a manifestarse en lomas algo más altas; pero en tiempos de seca deben ser
intransitables por la tropa y compararse a los desiertos.
He mandado que se pase revista de chifle
esta tarde; asimismo he dispuesto que nos vengan a alcanzar las carretas que he
pedido a Areco, para adelantar los 100 hombres al Rosario y para igualmente
alcanzarlos con el resto lo más pronto; también se ha dispuesto en precaución
de que se recojan las bayonetas a las carretas; como esta gente no está
acostumbrada ni a la fatiga, ni al cuidado, es preciso tomar medidas que en
tros países serían ridículas; sufrirá 20 leguas a caballo y no puede andar 4 a
pie, sin grandes intermedios de descanso; por lo que hace al descuido es tan
propio de la educación que han tenido y del desprecio con que miran hasta
lo que le es más necesario para vestirse y cuanta otra incomodidad trae
consigo el ir con el pie desnudo.
Son las 4 de la tarde y aún no tengo
razón de las carretas pedidas, el sol está fuerte todavía; pero sin embargo he
mandad se traigan los bueyes y luego que lleguen, que se toque generala
para batir as tiendas y continuar la marcha hacia la Posta de Areco.
Se verificó la salida a las cinco y
llegamos al punto llamado de la Cañada del Señor Segundo a las 9 dadas de la
noche, bien que auxiliados del viento fresco; estas seis leguas que señala el
itinerario son ocho y las ha andado la tropa; pero ha ven ido fatigada y tengo
algunos enfermos.
He sabido que vienen 14 carretas del
Fortín de Areco y estarán mañana al amanecer en este puesto. Se tocó a silencio.
San Benito y Arrecifes. Adelante.
Día 1 de Febrero del año 1812.
A las cinco de la mañana han llegado 14
carretas que me envía el Comandante el Fortín de Areco, entre ellas cinco con
que auxilia gratuitamente el vecino de allí, Don Antonio Díaz, pagándose
únicamente los peones, en consecuencia he dado las órdenes para que la, 1, 2,
3, 4 y 6 Compañías marche a posesionarse del Rosario, conforme a la orden
del 29 del pasado, del Señor Jefe del Estado Mayor número tres y he dado el
mando al capitán de la última, Don Silvestre José Alvarez y la instrucción que
señala el número 2.
Se ha puesto la tropa en marcha a las 8
y queda el resto del Regimiento, para verificarla a la tarde, esta situación es
deplorable, las aguas pésimas, el campo pelado y el ganado muy flaco, nos han
donado cinco cabezas la esposa de Bergez de que le he dado certificación.
A la 5 de la tarde seguimos la marcha
dando un rodeo para poder pasar el río de Areco en paraje menos incómodo que el
que presenta el camino de la Posta; es muy pantanosa la Costa Oeste de este Río
y si alguno necesita un puente en la cuesta que hemos traído, es este; toda
especie de carruaje sufre mucho al pasar; se nos atolló una carreta
que nos
detuvo hora y media, y anduvimos hasta cerca de las 12 de la noche por terrenos
de bañado que en tiempo de lluvias ha de ser penosísimo su tránsito, y a esa
hora campamos a las inmediaciones de una laguna de muy mala agua.
Como las carretas ya me presentasen
capacidad, aunque incómodamente para conducir la tropa, y por otra parte la
fatiga de esga con los grandes calores de que ya tenía algún signo de
enfermedad no me permitiese hacer las marchas con la posible prontitud que se
requiere, según estoy persuadido por los antecedentes que tengo y noticias
vulgares que he oído, he dispuesto que suban a ellas para de este modo evitar que
haya más enfermos y conseguir el bien del servicio.
San Juan y Jujuy. Atención.
Día 2 de Febrero del año 1812.
Antes de la cinco de la mañana se tocó
generala y nos pusimos en marcha a las 6; se fueron algunos bueyes en la noche,
pero se remedió la falta con 4 que franqueó la viuda de Romero, y diez y seis
Don Andrés Castro; hicimos alto en la Posta de Lirio (Chacras de Ayala), a las
9 y 1 / 2 del día, allí se dio de comer a la gente y el descanso conveniente.
Los campos son llanos y están hermosos
con las lluvias; el pozo de la Posta nos ha surtido de agua que es muy buena, y
aunque no hay cardo seco alguno a los alrededores con algunos huesos y leña que
se ha traído del camino, se ha cocinado.
Así el Maestro de la Posta, como el
Comisionado del Partido Don Pedro Pablo Genes, se han esmerado en auxiliarme
con bueyes, con lo que se han devuelto los de la viuda de Romero.
A la 5 de la tarde se tocó generala y
marchamos hasta las 9 de la noche en que e hizo alto para dar descanso a
la tropa, y asimismo a los animales que se ataron a las ruedas para estar
prontos al salir la luna; luego que saló seguimos en camino y llegamos a la
Rivera de Arrecife a las dos de la mañana.
Como a la distancia de una legua al
Oeste del Río de Areco empieza a elevarse la tierra en lomas algo altas hasta
este punto; pero los caminos son excelentes, y tanto la infantería como la
artillería y caballería podrían operar muy bien en caso necesario y tomar muy
buenas posiciones ara situarse, bien que no para mucho tiempo sin proveerse de
lo necesario para vivir, pues los campos no tienen leña y aunque (tachado: son
escasísimos de agua), se podría remediar la escasez de agua haciendo pozos ya
se deja ver que esto no es bastante sino para lo más necesario”.
Santo Domingo y Quilmes. Energía.
Día 3 de febrero del año 1812.
Al rayar el día dimos principio al
pasaje del Río Arrecife, que por ser barrancoso por una y otra ribera presenta
algún cuidado en la operación; estaba a vado por consiguiente se facilitó más,
pero tardamos hasta las 8 y 1/ 2 de la mañana en pasar las 21 carretas, bien
que sin ningún perjuicio, seguimos por la Costa Oeste del Río hasta distancia
de un cuarto de legua del paso donde nos campamos a la orilla del Río e
inmediación de un manantial de excelente agua; se trajo el ganado y se
dispuso que todos lavasen sus ropas.
Los bueyes que traíamos de las Chacras
de Ayala se devolvieron y nos auxilió con 35 Don Enrique Sierra con toda
generosidad y 13 más que trajo el Oficial Comisionado de la Estancia de los
Bethlemitas sin embargo de que nos escribía el Padre Mayordomo Fray Juan de los
Dolores, alias, Llano que solo tenía 4 y estos inútiles.
Los puntos de defensa que presenta este
Río en la distancia que se ha recorrido, son más ventajosos de esta parte del
Oeste y sus alrededores,(sic), son de lomas mucho más elevadas que las de la
costa Este.
Cuando cesó el terrible ardor del sol
cerca de las 5 de la tarde nos pusimos en marcha presentando el tiempo el
aspecto de un gran temporal por el Oeste; pro llegamos como hasta distancia
de seis cuadras del pueblo, del Arrecife, cuando ya obscureció e hicimos alto
hasta que saliera la Luna,; entre tanto se levantó un fuerte viento del Sur
Este que refrescó bastante, despejó la atmósfera y así luego que brilló la Luna
seguimos nuestro camino en que estuvimos (tachado hasta la posta de Las
Fontezuelas), hasta las 7 de la mañana sin más novedad que haber encontrado a
Don Santiago Vázquez que venía del Ejército de los valientes de la Banda
Septentrional, de que nos dio buenas noticias”.
San Patricio y Buenos Aires. Libertad,
Día 4 de Febrero del año 1812.
A las 7 de la mañana llegamos a la Posa
de las Fontezuelas, y campamos; las aguas han favorecido estos terrenos y
están abundante de pastos, bien que, como todos escasos de leña, se proveyó de
carne a la gente y se determinó que
descansara, como también devolver la boyada de Sierra y Belermos; pero Don
Fernando Tavares franqueó 70 con la mayor generosidad, y lleno de
satisfacción por que se le proporcionaba esta ocasión de servir a la Patria.
De este punto sale el camino para el
Perú el que yo llevo que se llama el Del Medio y otro que se dirije hacia la
Costa del Paraná.
Todos son campos llanos con sus colinas
poco elevadas y están abundante de ganado; también se hallan poblados más que
los que dejamos desde el Puente de Marquez, y lo atribuyo a las más aguadas
permanentes que se encuentran con que se sostiene el proceso del ganado vacuno
y caballar.
El viento era fresco y proporcionó que
se tocara generala a las 1 y 1 /2 y a poco más de las dos de la tarde se
continuó la marcha hasta la Posta de Don Laureano Olmos a donde llegó la tropa
a las doce y minutos de la noche; se hizo alto hasta las dos y media de la
mañana.
El camino es muy bueno y solo se
encuentra el Arroyo Ramallo que aunque algo barrancoso como no lleva casi agua;
debiéndola como todos los de la carrera a las lluvias no presentó mayor
impedimento a su paso, y pocas veces podrá detenerlo.
El agua del pozo de la expresada Posta
es muy regular, leña si no hay la del cardo, se suple con huesos, o con la
bosta seca.
Dista este punto de la Costa del alto
Paraná por la parte más corta de diez a doce leguas”
San Liberto y el Alto. Unión.
Día 5 de Febrero del año 1812.
Desde las dos y media de la mañana hemos caminado hasta cerca de las 8, para
pasar el Arroyo del Medio a cuyas inmediaciones hemos campado y dispuesto se
traiga el ganado, la gua es salobre y leña no hay sino la de bosta seca, que proporciona
la multitud de ganado que cubre ambas riberas del Arroyo, en cuanto alcanza la
vista y venimos viendo desde que aclaró el día por uno y otro costado del
camino, de los que iban a beber.
Los campos que hemos corrido se elevan
en colinas suaves y están áridos por falta de lluvias.
La bajada para el arroyo empieza como a
distancia de media legua, está en pendiente muy cómoda y el paso del arroyo es
poco barrancoso y también de poco pantano; su salida tendrá igual
distancia hasta las tierras que se eleven con suavidad y sus pantanos no deben
ser muy incómodos aún en tiempo de muchas lluvias; aunque la tierra es gredosa
su fondo es de tosca suelta, como lo demuestra lo del indicado Arroyo.
El sol y el viento Norte que corre
nos ha abrazado, felizmente hemos tenido un corto alivio con el agua de
un pozo de la Casa que tenemos a la distancia de un cuarto de legua, es de las
buenas que hemos encontrado en el camino.
Se tocó generala a las 5 y 1 /2 de la
tarde y hemos andado por campos muy áridos hasta las doce de la noche que nos
acercamos al Arroyo Pabón.
Entre ocho y nueve de ella, me encontré
un soldado de Regimiento de Caballería de la Paria, con pliego de su Coronel
número,(en blanco),
Aunque el tiempo aparentaba gran
tormenta quedamos dispuestos a pasar el Arroyo luego que saliese la luna
San Vicente y Quilmes. Fraternidad.
Día 6 de febrero del año 1812.
Nos hallamos campados a la
inmediación del Arroyo Pabón, ya referido y son las ocho y tres cuartos de la
mañana; la tormenta que amenazaba descargó con grande huracán que nos echó por
tierra algunas tiendas; el agua ha sido abundante y fuerte, aún continúa ella y
el viento, bien que este no se ha fijado y ha corrido todos los puntos de la
aguja; esperamos que abonance un poco para emprender el paso del referido
Arroyo lo más pronto que sea posible, es bastante barrancoso y mayor la
elevación de los terrenos en su Costa Norte; el terreno que pisamos es muy
gredoso y desigual.
He contestado al Coronel del Regimiento
de Caballería de la Patria con el número,(en blanco).
Son las 10 y ½ de la mañana y recibo el
papel del Capitán de la 5ta. Don Silvestre Alvarez, número, (en blanco), a que
he contestado con el mismo número, (en blanco); El agua sigue pero parece que
el tiempo va a aclarar,
En efecto a las doce cambió el viento a
la parte del Oeste y nos dio tiempo para orearse la ropa y poder seguir
nuestro camino a las 3 de la tarde y verificamos el paso del Arroyo sin mayor
trabajo sin embargo de que es barrancoso y fangoso en sus orillas; continuamos
por terrenos muy llanos hasta el Arroyo Seco en donde campamos a las 9 de la
noche a las inmediaciones de la Casa de Doña María Gómez y otra cuyos pozos
aunque de agua bastante mala nos sirvieron para refrigerar la sed; se
dispuso quedasen los bueyes atados a las ruedas para marchar al salir la
luna, y sin más novedad se tocó a silencio.
Santa Catalina y Retiro. Concordia.
Día 7 de Febrero del año 1812.
A la una y media de la mañana se tocó
generala y marchamos por caminos y campos muy llanos, sin dificultad alguna y
con poco trabajo que se hizo en la barranca de salida de una Cañada que han
formado las aguas de lluvia, y llaman Saladillo, pasaron muy bien las carretas
y hallándonos a distancia del Rosario de cerca de una legua y se formó la
tropa, sacaron las banderas y con todo orden seguimos hasta este pueblo, cuyo
Comandante Capitán Moreno y el Alcalde con otros vecinos salieron a recibirnos
y ofrecérsenos.
Llegados a la Plaza Mayor se formó en
batalla y habiéndose depositado las banderas en la casa que me estaba
preparada, marchó la tropa al Campamento que ya estaba señalado por el
Capitán Alvarez en na buena situación cerca del Río y bajo unos árboles que
favorecen mucho por la estación en que nos hallamos.
El pueblo no tiene casas ni galpones
para colocar la gente; se ha encontrado una a propósito para parque de las
municiones que traemos y almacén de los vestuarios y además útiles
del Regimiento.
El Coronel y Oficiales de Caballería de
la Patria y el Capitán de Artillería , Herrera, como igualmente el Capitán
Rueda, encargado de la construcción de la Batería se me han presentado;
he tenido mis conferencias con los dos últimos, para la pronta conclusión de la
obra en la que me dicen se trabaja con bastante anhelo, sin embargo de la
falta de gente, y lo que es peor del dinero; pienso esta tarde ir a verlo todo
por mi mismo, a fin de tomar los conocimientos prácticos que se
requieren”.
(Aquí finaliza la relación manuscrita
del “Diario de Marcha” de Manuel Belgrano).
5.- En la Villa del Rosario.
Al día siguiente de llegada el 8 de Febrero
de 1812, el Coronel Manuel Belgrano, se ocupó de supervisar personalmente “los
trabajos que se realizaban en las baterías en construcción, del Rosario,
tras la ceremonia de recepción”. Le informan de Buenos Aires, “despachado el 3
de Febrero, la salida de varios carpinteros con el propósito de reforzar el
personal especializado que no debía abundar en la región”.
Belgrano responde: “desde la Posta de
Areco por la fatiga y los grandes calores el personal se iba enfermando,
continuamos el viaje en Carreta y a pie con cuanta celeridad ha sido posible”.
El General Bartolomé
Mitre en la “Historia de Belgrano y la Independencia”, escribió:
“el Ejército a su mando parecía una legión romana sujeta a las
normas de una orden monacal”. (Edit. Anaconda. Reedición - 1950 -. Bs. As.).
6 . - Bibliografía. Referencias:
1.-Mitre Bartolomé, Historia de Belgrano y de la Independencia Argentina. Cap. XVII. págs. 208 a 2014. Edit. Anaconda, Reedición. 1950- Bs. As.
2. .- De Marco Miguel Angel, Ensinck Oscar Luis, Historia de Rosario, Museo Histórico Provincial de Rosario, Dr. Juloio Marc, Cap. III, .- págs. 44 a 59. - Edit. Colmegna, Santa Fe, -1978,.
3.- Pérez Amuchástegui, Crónica Argentina, Tomo 1°, - págs. 328 a 332-. Edit. Códex, - Buenos Aires, - 1968-
4.- - Vaccarezza, Silvio Roberto, (ex Pres. del Isntituto Belgraniano de Rosario), me facilitó fotocopias de Textos obtenidos de aquellas fotocopias que rescató Antonio Carrizzo (Locutor - Periodista) en un remate y autenticadas por la Academia Nacional de la Historia y la publicación del libro "El Diario de Marcha de Belgrano" publicado por el Inst. Nac. Belgraniano con anotaciones del Dr. Ernesto J. Fitte, y Prólogo del Prof. Aníbal Lusuriaga.- 1995.
5.- Bruno Cayetano.( SDB). "El ocaso Cristiano de los Próceres". Rosario. Didascalia .1988.-
6.- Furlong Guillermo. (S.J). "Belgrano el Santo de la Espada y de la Pluma". - Bs. As. - 1974.
7.- Consultas y entrevistas con Historiadores rosarinos: Agr. Juan Manuel Castagnino, (Ex Pres. del IBR). Dr. Tomasinii Freyre, Dr. Miguel Chiarpenello, Dr. Nardiello Víctor Hugo, sobre: "El Regimiento de Castas, de Pardos y Morenos,; de la Canción Patriótica de Esteban de Luca, coreada en el vivac, al grito de ¡Viva la Patria! y del Capitán Celedonio Escalada.
8.- Es un aporte a mis colegas docentes y amigos belgranianos, en este año del Bicentenario de la Independencia Nacional, (1816- 2016).
9.- Recopilador y autor de la ficha: Prof. Luis Angel Maggi. - Secretario del Instituto Belgraniano de Rosario. (07 de Junio 2016).
Diario de Marcha del Coronel Belgrano a Rosario, 1 5 días de los meses de Enero y Febrero de 1812
Presertación en el INSTITUTO BELGRANIANO DE ROSARIO. 02 de Julio del 2016.
1.- Introducción.
El texto que transcribo, (soy recopilador de datos), fue comentado y anotado por el eminente historiador Dr. Ernesto J. Fitte, quien fuera Miembro de Número de la Academia Nacional de la Historia y del Instituto Belgraniano de Buenos Aires”, en Cuaderno de Investigación Histórica publicado por el I. N. B. el año 1995, con el Prólogo del Prof. Anííbal Jorge Luzuriaga, Presidente del Instituto Nacional Belgraniano, en ese momento.
Esta publicación está destinada a los docentes de Historia y Ciencias Sociales, que no posean el texto entero, pues desde el Instituto Belgraniano Rosario, procuramos difundir las ideas y acciones del General Manuel Belgrano.
El Diario de Marcha escrito por nuestro prócer Manuel Belgrano abarca desde el día 24 de Enero, al 07 de febrero del año 1812. Este documento en el que Belgrano, con una cuidada caligrafía, da cuenta con gran detalle de las peripecias de la marcha. de los milicianos.
El texto que transcribo, (soy recopilador de datos), fue comentado y anotado por el eminente historiador Dr. Ernesto J. Fitte, quien fuera Miembro de Número de la Academia Nacional de la Historia y del Instituto Belgraniano de Buenos Aires”, en Cuaderno de Investigación Histórica publicado por el I. N. B. el año 1995, con el Prólogo del Prof. Anííbal Jorge Luzuriaga, Presidente del Instituto Nacional Belgraniano, en ese momento.
Esta publicación está destinada a los docentes de Historia y Ciencias Sociales, que no posean el texto entero, pues desde el Instituto Belgraniano Rosario, procuramos difundir las ideas y acciones del General Manuel Belgrano.
El Diario de Marcha escrito por nuestro prócer Manuel Belgrano abarca desde el día 24 de Enero, al 07 de febrero del año 1812. Este documento en el que Belgrano, con una cuidada caligrafía, da cuenta con gran detalle de las peripecias de la marcha. de los milicianos.
"Esos 15 días inolvidables desde Buenos Aires a
Rosario fueron escritos (para nosotros) por este heroico abogado y militar, en
un cuaderno donde describe las tareas realizadas a diario, los aspectos físicos
y geológicos del territorio, las características sociales, económicas y religiosas
de las personas, que encontraron a su paso las tropas que comandaba. Esta tropa
sufría el calor del verano, la falta de agua, la comida racionada, el descanso
bajo la carpa en el suelo, la higiene del cuerpo y de la ropa cuando
encontraban un curso de agua abundante y la acumulación del cansancio".
Este escrito que nos revive aquellas acciones y
vivencias, fue pensado por la mente de un estadista, que programaba el
futuro, de un periodista deseoso de comunicar esta acción patriótica, gesta que
llegaría a los confines de la Patria asegurando sus fronteras, liberándolas de
la rapiña extranjera y colocando los firmes mojones de su existencia.
Este documento belgraniano nos permitió conocer
detalles de los pueblos con sus caseríos, comarcas, campos con sus labradores,
pioneros del crecimiento argentino, que vivían autoabastecidos, sin esperar
ningún regalo, se hubieron perdido para siempre.
2..- Historia del Regimiento de Patricios.
Durante la Revolución de Mayo, los
Patricios y su comandante Saavedra desempeñaron un papel importantíísimo, sobre
todo como fuerza disuasoria. La Revolución de Mayo se produjo en el momento
elegido por Saavedra y pasó a presidir la Primera Junta de Mayo de 1810
El 16 de noviembre de 1811 los
regimientos 1 y 2 fueron unidos, pasando a ser el N° 1 de Patricios, y asumió
su jefatura el coronel Manuel Belgrano.
Las palabras de Belgrano al gobierno al ser
designado jefe del Regimiento Uno de infantería Patricios fueron: “Procuraré
hacerme digno de llamarme hijo de la Patria”.
3.- El Motín de las Trenzas.
El 6 de diciembre de 1811 sus
hombres protagonizaron el llamado Motín de las Trenzas, en contra de su nuevo
jefe, reclamando conservar su autonomía y el privilegio de elegir a sus
comandantes, levantándose contra el Primer Triunvirato. Luego de sofocada esta
rebelión, el Regimiento pasó a ser "de línea", y sus soldados fueron
“condenados a servir en él por muchos años y otros se les aplicó la disciplina
militar. Varios Sargentos Cabos y Soldados fueron fusilados el 10 de Diciembre de 1811 en la Plaza de la Victoria,; con este hecho se inicia una Guerra Civil que duraría 60 años" . (Gaceta de Bs.As.-10-12-1811).
El Poder Ejecutivo de esos años, el
Triunvirato, tenía informes que los realistas proyectaban una incursión por el
Río Paraná, hacia el Norte, con el fin de sorprender alguna población del
litoral. Urgidos por este informe los Triunviros, pensaron enviar “una
Fuerza Expedicionaria que custodiase las poblaciones que se hallaban a lo largo
del Río Paraná”.
El Triunvirato con sano criterio “pensó
poner en acción a los integrantes de ese Regimiento, arrancándolos del foco de
las intrigas y restableciendo el espíritu militar”. El Coronel
Manuel Belgrano recibió las órdenes” para que aliste a su Regimiento con
los elementos necesarios para emprender la campaña “Defensa del Litoral”. Fue
para él un inmenso desafío pues algunos de los integrantes estaban “fugados, fueron
desertores , o transferidos a otros cuerpos y el resto que permanecían en el
Regimiento sufrían un desquiciamiento moral y carecían de elementos
necesario para su funcionamiento, próximo a disolverse”.(AGN. 1812).
4.- Manuel Belgrano recibió la orden de custodiar el Río Paraná hacia el Norte.
El Coronel Manuel Belgrano comenzó
por “levantar la moral” y con el pensamiento puesto en el
reaprovisionamiento. El 13 de Enero de 1812, Belgrano recibió “un aviso
que le fijaba fecha de partida, dentro de tres días , con el Regimiento a su cargo
rumbo a la Bajada de Santa Fe”. El mismo día Belgrano puso en conocimiento al
Jefe del Estado Mayor Don Francisco Javier de Viana que “para su cumplimiento
debía proveérsele previamente de las necesarias prendas vestuarias, de
las mochilas que faltan, de las municiones competentes, según el objeto de mi
marcha y en el caso de ser a caballo o en carros, de las monturas y el número
suficiente de estos últimos transportes, las tiendas de campaña , un bote de
tres o cuatro remos por banda que deberá conducirse en ruedas, haya el
camino que fuere”. (A.G.N.-1812- X.3 10, 3).
5.- Preparativos para el itinerario de la Marcha hacia Rosario.
El Coronel Manuel Belgrano solicitó “que
la Superioridad le señalase el itinerario a seguir y que por anticipado
se advirtiese a los Comandantes o Jueces de las distintas localidades que
atravesaría la columna, a fin que se le tuviese preparada carne y leña a su
justo precio, sin olvidar la indicación si el gasto lo abonaría el erario
o sería pagado por cuenta de la tropa”. (Ibid.)
La respuesta que e dio el Comando fue “que la marcha
se efectuaría a pie, debiendo calcularse para cada soldado una dotación e 200
tiros”. En cuando al resto de los pertrechos solicitados, le era
requerido “que elevase la pertinente nómina”.
El día 14 de Enero de 1812, fueron entregados al
Subteniente José Roxo, 500 fusiles, lo cual nos permite estimar en menos de
medio millar los efectivos del cuerpo. A los pocos días se completaba con
100.000 cartuchos a bala y 2.000 piedras a chispa”.
“Para el alojamiento de los soldados, oficiales
y suboficiales, en los campamentos le fueron entregadas 40 tiendas de campaña,
en forma de pabellones.
Los soldados cubrirían el trayecto caminando, para la
oficialidad superior se autorizó hacerlo a caballo para ello se ordenó el
suministro de ocho monturas completas”.
Los elementos accesorios que pidió Manuel Belgrano
antes de la partida, “obtuvo 9 ollas grandes, 12 azadas y otras tantas hachas y
362 chifles”. El transporte de todo el material descripto “fue cargado en 16 carretas
adquiridas especialmente que costaron 40 pesos cada una según factura del
vendedor”. (Ibid).
El Coronel Belgrano “realizó el viaje en un carruaje
con aperos, utensilios, más un criado encargado, cuyo dueño era Roque
Jacinto Pintos, quien alquiló la volanta hasta la Capilla del Rosario”. En una
de las carretas “viajaba un protomédico, Don Martín Rivero con un botiquín y
una caja de cirujía, para que atendiese cualquier urgencia, enfermos o
heridos”. La provisión de medicamentos solicitados por el Coronel
Belgrano “comprendía un surtido de jeringas, potes, sales, ungüentos,
emplastos, rollos de vendas, que recién fueron completados algunos
elementos, enviados por la Intendencia Militar, cuando la expedición estaba
acampada en San José de Flores”. (A.G.N. Ibidem. Cajas de Bs. As.. Enero de 1812).
El 22 de Enero “Belgrano requirió que se arreglara
previamente el tema económico para la tropa, aquellos hombres que salían a la
campaña con un destino incierto, no podían dejar Buenos Aires, mientras no se
les hubiese abonado la paga atrasada”. A la tropa se le adeudaba la última
mensualidad y Belgrano “entendía que era justo socorrer primero a quien va a
sufrir los trabajos de la campaña”. Luego de este requerimiento dos días antes
de la partida “fue satisfecho sin dilación alguna, o sea que el mismo 22 de
Enero el Habilitado del Regimiento 5, recibió para saldar la deuda
correspondiente al mes de Diciembre la suma de 13.500 pesos”. (Según datos de
la época “un Coronel ganaba menos de 240 pesos mensuales, un Capitán 80 pesos,
y los soldados no alcanzaban a percibir 14, siendo de infantería”. (Ibid.
S.III, -1-5-9- Cajas de Bs. As. 1812).
El 23 de Enero, el Coronel Belgrano y sus ayudantes
“la víspera de la salida repasaban y repasaban el listado de los nombres de los
integrantes de la tropa, los pertrechos solicitados, los entregados y los
faltantes. En tal sentido Belgrano se excusaba ante el jefe del Estado Mayor,
“no serle posible el envío del libro de los Servicios con la lista de los
oficiales y agregados junto con la del personal subalterno, por encontrarse la
mayoría sumamente atareada en estos momentos, verificando si se aplicaban las
órdenes dadas para la organización de la marcha. Corresponde señalar que entre
ellas que los oficiales solo llevasen una maleta de equipaje, y la tropa su
mochila”. Belgrano con dolor declaraba que “como el Regimiento de mi cargo no
la tiene, no me es posible hacerla cumplir por atrasos en el
aprovisionamiento”. ( Ibidem.AGN.- S. X. 3-10-3).
El 24 de Enero de 1812, al anochecer el Regimiento
emprendió el camino a Rosario. La razón era que en el día el verano calcinaba y
buscaban la sombra. Las personas y los animales marchaban tranquilos por la
noche, con una temperatura agradable.
El Diario de Marcha del Coronel Manuel Belgrano, de su puño y letra.
El Diario de Marcha del Coronel Manuel Belgrano, de su puño y letra.
1.- El Diario de Marcha del Coronel
Manuel Belgrano, nos acerca a los momentos que vivió y a su intenso deseo de
difundir la gesta patriótica que iniciaba, al mando de un Regimiento que tenía
el encargo de frenar el avance realista que asolaba las costas del Río Paraná.
2.- Este pasado histórico trascendental
en la Historia Argentina nos llega desde el día en que ocho carillas
manuscritas, fueron descubiertas por el prestigioso locutor radial,
animador televisivo, periodista y actor, Antonio Carrizzo, quien las adquirió en una subasta pública. “Cuando oyó el
anuncio del rematador que ese escrito era atribuido a Manuel Belgrano, despertó
su interés y lo atrapó de tal forma que adquirió esas carillas, sin
pensar en el precio”.
Antonio Carrozzi Abascal, más conocido como Antonio Carrizo, nació
el 15 de Septiembre de 1926 en General Villegas, Provincia de Buenos
Aires y falleció el 1 de Enero del 2016, (89 años), en la ciudad de
Buenos Aires. Su perfil: “fue lector voraz,
cálido, entrañable y encendido divulgador de las manifestaciones históricas y
culturales argentinas, como La vida y el Canto”.
3. -“Esas ocho carillas halladas y rescatadas
afortunadamente por Antonio Carrizo Abascal, fueron autenticadas por la
Academia Nacional de la Historia”. Esa adquisición develó el dato
histórico: “la existencia del Diario de la Marcha de Buenos Aires a Rosario,
escrito por el Coronel Manuel Belgrano, entre el 24 de Enero al 7 de
Febrero de 1812”.
4.- Los datos que nos aportó el abogado
Manuel Belgrano, Militar, Economista, Creador de Escuelas y Periodista, fueron escritos por la
noche, a la luz de un candil, en el escritorio de su volanta, o cuando hacían
un alto en el camino, pues durante el día, su carruaje se habría movido,
ajetreado bastante con el camino desparejo.
El día 24 de Enero de 1812.
“En la mañana de este día se cargaron
las diez y seis carretas que se nos señalaron con las municiones, tiendas de
campaña y útiles de las diez compañías del Regimiento y asimismo la Caja
de los caudales y la de Capilla en el mejor orden posible, dejando señalada la
hora a la 4 de la tarde para la reunión de la tropa en el Cuartel a fin de
emprender la Marcha.
A la expresada hora se tocó a Asamblea y
después de darse las providencias oportunas y repartir los chifles que se
adoptaron para cantinas, se puso en marcha el Regimiento a las 5 y ½ con
destino a San José de Flores para donde había mandado las carretas en la mañana
y a cuyo punto ordené que se llevase el ganado y que el Subteniente Anglada a
quien di orden de que se adelantase, buscara la leña suficiente para
cuando llegásemos, asimismo mandé al Capitán Forest con el Cadete Díaz
para que delinease el campamento a fin de que la tropa levantase Las
tiendas luego que llegase al punto.
Siguiendo la marcha hicimos alto en los
Corrales de Miserere para que se proveyese la tropa de agua y tomase aliento;
allí fuimos bien recibidos por el Rvdo. Padre Fray Viera quien está a cargo del
Hospicio de los Padres Mercedarios y después de una media hora de descanso
continuamos la marcha hasta el Campamento de San José; el camino en la mayor
parte es bueno, pero tiene pasos que en tiempos de agua debe ser intransitables
para marchar a pie.
A las 9 de la noche llegamos al punto
indicado y habiéndose mandado formar en batalla se dieron las órdenes de que
por Compañías señalase cada Capitán los que habrán de ir a levantar las
tiendas, se previno que los fogones se establecieran a sotavento del Campamento
y se mandó formar la guardia de prevención situándola en el punto que se
conceptuó más aparente dándole la orden de que se estableciese centinelas
al redor (sic) del Campamento que no deberían permitir saliera alguna persona
de él, sin previo permiso mío.
Levantadas las tiendas y recogido a ellas,
las Compañías, por su orden, luego que cenaron se tocó la retreta y todo
permaneció tranquilo. Se mataron 8 reses.
San Martín de Tours. Cnstancia.
Día 25 de Enero del 1812.
No siendo posible continuar la marcha
por deberse tomar varias disposiciones para el mejor arreglo de ella, mandé que
la tropa trabajase por el espacio de una hora, y concluido repartí los
Quadernitos de las Obligaciones del Soldado, etc, para que se lean en las
Compañías en los ratos que los permita el servicio; y se dispuso que se trajera
el ganado para que comiera la tropa.
Este punto presenta buenas proporciones
para campar, sin embargo de que el agua es de los pozos que tienen los vecinos
bastante regular; y de que la leña solo puede obtenerse de los acopios que
ellos mismos hacen; también podría servir para situar una gran guardia que con
observación por todos los caminos que se hallan a pocas distancias y los que
vienen a incidir en él, averiguase el Gefe las clases de personas que entran y
salen en la Capital de cuya noticia se carece con bastante detrimento de la
buena policía.
El pueblo empieza a formarse; la Iglesia
aún no está concluida; su largo 20 varas, ancho 8 y ½; a las cercanías de ella
has y 16 a 20 familias; son contados los edificios que hay de material; a las
inmediaciones hay quintas pertenecientes a vecinos de la Capital con plantíos
de duraznos y algunas huertas; según se me ha instruido el Curato tiene legua y
¾ de jurisdicción y los feligreses que la ocupan son 1700; bautismos 180 al año
y casamientos 20, es de admirar que la población no está ni en razón de 10 a 1
con los bautismos. El Alcalde Don Juan Pablo Cruz se me presentó avisándome que
tenía orden del Excelentísimo Gobierno para auxiliarme en lo
que fuese necesario y se me ofreció. Igual oferta me ha hecho el Señor Cura Don
Miguel García
A las 4 de la tarde di la orden de
marcha y en esa hora recibí tres oficios del Señor Gefe del Estado Mayor; dos
de ellos son referentes a las penas impuestas por E. E. a los desertores y
acerca de la mejor disciplina.
Formadas las tropas mandé que
hicieran el círculo y en él les hablé como aparece en el papel número primero y
enseguida la orden acerca de desertores, número segundo de que ya hay
referencias; concluido el acto manifestó la gente su contento con una
aclamación general de ¡ Viva la patria!.
Minutos antes de las seis se marchó, el
camino es excelente y tiene los recursos de agua en los pozos de las casas;
hicimos alto por tres veces en que emplearíamos 3 / 4 de hora
Y llegamos al punto señalado para campar
llamado de la Cañada de Morón, a las inmediaciones de la panadería de Don
Francisco Rodríguez a las 11 de la noche.
Se desplegó en batalla, se señaló la
guardia y levantadas las tiendas la gente cenó y sin más novedad se tocó
la retreta”.
San Pedro Ensenada. Empeño.
Día 26 de Enero del año 1812.
Día 26 de Enero del año 1812.
A las cinco de la mañana se tocó a Misa
y formada la tropa en la calle la oyó; luego se mandó retirar a sus tiendas a
descansar; se les proveyó de carne y se dio orden al Capataz de las
Carretas para que a las 3 de la tarde trajese los bueyes a fin de
anticipar su salida con el objeto de que al llegar la tropa se hallase
con las tiendas levantadas.
l punto este tiene agua la suficiente
para beber; hay una cañada que en tiempo de aguas
Se hace intransitable para pasar a pie,
pero se ve un puentecito que sin duda se ha construido por esa necesidad
y es un alivio, en tal caso, para la tropa que marche a pie.
Como a 8 cuadras de distancia al Sur se
halla el pueblo de Morón en donde está el pueblo del Curato; el que según
noticias tiene jurisdicción de Norte a Sur 13 leguas y de Este a Oeste por la
parte menor de 4 a 5 y por la mayor de 6 a 7; contaba en 1810, 3451
feligreses en 520 poblaciones; sus bautismos un año con otro, son
60; las ocupaciones de los habitantes son la labranza y el pastoreo.
Se batieron las tiendas a las tres de la
tarde y nos pusimos en marcha a las 4 y 1 /4 de la tarde para pasar al
Puente Márques. Llegamos a las 7 y 1 / 2 habiendo alto dos veces para dar
alivio a la gente; el tiempo amenazaba; pero felizmente no ocurrió novedad y
mejorada la noche hubo retreta con la música; se cantó el himno patriótico y
todos se retiraron después de un Viva general por la Patria.
De la parte del Este del Río de las
Conchas hacia donde está el puente hay puntos muy ventajosos para defender
aquel; y en lo general son más altas las tierras de dicho lado y presentan
proporciones para defender los pasos, que aunque den Vado, cuando los
tiempos son secos, tienen sin embargo los obstáculos tanto en la bajada como en
la subida por la altura de las barrancas y es indispensable culatear los carros
si no se quiere pasar por el Puente; a esto atribuyo que el camino se haya
alargado más distrayéndolo del Hospicio de los Mercedarios por donde a la
simple vista parece más corto.
Santo Domingo y Soriano. Celo.
Día 27 de Enero del año 1812.
A las 4 de la mañana se tocó la diana;
pero no pudimos ponernos en marcha hasta cerca de las seis por las Carretas;
caminamos hasta la estancia de Álvarez a donde llegamos a las 9; no había más
agua que suministraba el pozo de la casa, (tachado) a poco de haberse sacado se
agotó y solo suministraba lodo líquido; el tiempo se presentó de tormenta; pero
no llovió; toda la campaña que hemos corrido es llana y propia para que
maniobre la caballería; no hay leña, ni agua y el ganado es escaso.
Refrescado el tiempo ordené la marcha
para las 4 y dio principio para las 4 y ½ encontramos algunos malos pasos de
resultas de lluvias y fue preciso hacer deshechos que no fueron menos penosos
por los espinares de que está cubierto el campo.
Llegamos al Campamento de de Cañada de
Escobar a las 9 de la noche después de varias paradas que se hicieron en el
camino; escasez de leña y lodo líquido por agua; sin embargo se cenó y fue
preciso mandar tocar a silencio a las 11.
San Antonio y Candelaria. Valor.
Día 28 de Enero del año 1812.
Antes de la 4 de la mañana se tocó la
diana y a poco rato la generala para batir las tiendas y todos dispuestos nos
pusimos en marcha a las 5 menos ¼; caminos llanos y campos lo mismo; pero
todos cubiertos de espinares que ha sido indispensable hacer la marcha casi
toda en desfilada.
Entramos a la Villa del Luján a las 9 de
la mañana con banderas desplegadas y todo el orden debido y hemos campado
al Oeste del puente; mi atenciones de la parte del Cura Don Francisco Argerich
y del Alcalde Don Estanislao Jos;e Aguirre a quien he pedido 4 carretas para
auxilio del Regimiento que no lleva como acomodar a uno que se enferme y ni
pueden ir los útiles de Compañías en el orden para su mejor seguridad y
prontitud en expedirse.
El Puente y pasos de sus inmediaciones
que he visto pueden sostenerse muy bien; tienen posiciones de provecho y
el Río es barrancos de una y otra parte, la Villa mismo serviría de una
fortificación con bastante utilidad, tiene plaza y sus siete calles las más de
ellas con cercas de tunas bastante altas y espesas. La Iglesia es un
edifico fuerte y de regular arquitectura; el Cabildo es una casa de un alto que
tendrá de 14 a 17 varas de frente con su arquería alta y baja. Los
Bautismo anuales 150 poco más o menos, bien que la jurisdicción es bastante
extensa. El Río está enteramente despoblado de árboles; hay mucha escasez de leña
y se remedia con el cardo asnal seco en su tiempo como el presente; sus aguas
son salobres y solo potables cuando llueve mucho, que es a lo que debe
sus crecientes; pero tiene manantiales en sus riveras
que aunque de agua
gruesa puede beberse; nunca se queda sin agua aun en las mayores secas
atribuyéndose a que las nutrias, de que abundan, con cuevas mantienen
abierto los manantiales, u ojos de agua.
Se dio a la gente descanso y tiempo para
lavarse, sin permitir que pasaran a la Villa más que los escogidos
por las Compañías para que les trajesen lo que necesitaban siendo dos por cada
Compañía que debían ir juntos..
Entre dos y tres de la tarde cayó un
fuerte chubasco que anegó mi tienda y alguna otra; pero sin mayor perjuicio al
ponerse el sol se tocó a la lista, se rezó el Rosario y todos fueron a sus
compañías para cenar; a las 9 se tocó la retreta, y luego incontinenti a
silencio, sin novedad alguna.
En este día he convocado por dos veces a
los Capitanes y Comandantes de Compañías para tratar de la mejor disciplina
para desterrar las inicuas voces así de los Oficiales como de los Soldados, que
ofenden los oídos, para sujetar a los cadetes y hacerlos estudiar, que
son los jóvenes más pillos y más maleducados que he visto y para que por todos
los medios inspiren la subordinación, en Oficiales, Subalternos y tropa y haya
el mejor orden, privando toda especie de juego y cuanto pueda decir a desarreglo.
San Joaquín y Luxan. Espíritu.
Día 29 de Enero del año 1812.
A las 4 de la mañana se tocó generala; y
se levantó el Campamento e inmediatamente nos pusimos en marcha; un extravío de
camino nos ha hecho andar una legua de más y hemos llegado a ese punto de la Posta
de La Cañada de Rocha, cerca de los 9; el so ha sido furioso y se me han
enfermado en la marcha tres hombres; y la más de la gente ha llegado
estropeada; en este punto no hay más agua que la del pozo de la dicha Posta que
puede proveer agua para 800 hombres; no hay cardo para leña; y nos hemos
prevenido de biznaga acopiada en (hay un espacio en blanco), llanuras y más
llanuras sin árboles, ni cosa que se le parezca, si se exceptúan algunos montes
de fruta que hay en una u otra habitación y se ven a largas distancias.
He determinado hacer alto esta tarde
para que la gente tome aliento y se ponga en estado de seguir la marcha mañana.
El mal estado de educación en que están
la mayor parte de los Cadetes del Regimiento me ha obligado a reunir a todos e
imponerles el modo con que se han de conducir imponiéndoles el deber de que
hayan de hayan de estudiar por ahora las obligaciones del Soldado, Cabo y
Sargento de que me han de dar lección todos los días al tiempo que yo llamare.
Se tocó a lista, se rezó el Rosario, se
mudó la guardia y a las 8 y 1 / 2 se tocó la retreta y a silencio sin más
novedad.
San Gregorio y Rosario. Vigilancia.
Día 30 de Enero del año 1812.
A las 2 y 1/ 4 de la mañana se
tocó a diana y a las 3 la generala; a las 3 y 1 / 2 nos pusimos
en marca para llegar con la fresca a este punto de la Cañada de la Cruz dnde
hemos ocupado cuando ya empezaba a calentar el sol el agua es muy gurbia tanto
de la Cañada que la debe a la de las lluvias, como de una laguna grande que
está al lado del camino. Habitación de pájaros y de casi ninguna profundidad;
leña de cardo hay en abundancia en esta estación y tanto que me ha
obligado a situar el Campamento en el mismo camino; como también los carros de
municiones para evitar algún incendio.
En el camino me ha encontrado un
individuo que iba para la posta y me ha entregado un pliego del Señor Jefe de
Estado Mayor en que previniéndome que S. E. ha determinado que me haga cargo
del Mando Militar del Rosario y no altere en punto a fortificar lo dispuesto
por el Teniente Coronel Monasterio, me ordena adelante hacia aquél destino cien
hombres con buenos Oficiales y no siendo posible ejecutar esta disposición,
según la importancia que me hacen concebir mis anticipados conocimientos sobre
ellos, marchando la tropa a pie y que por otra parte los calores son terribles,
ha mandado llamar al Alcalde del Partido para pedirle auxilio sin lo cual es
absolutamente imposible cumplir con la indicada orden.
La distancia de 7 leguas a que estaba el
predicho Alcalde que lo es el de la Hermandad de San Antonio de Areco no le ha
permitido llegar a este punto hasta las tres de la tarde,
Hemos tratado del modo de lograr las
carretas necesarias y le he pedido ocho que hayan de estar en la Posta de Areco
para mañana al ponerse el sol a fin de que se puedan adelantar los cien hombres
arriba expresados.
Al mismo tiempo y conceptuando la
importancia de que las fuerzas que están a mi mando pasen al dicho destino del
Rosario para si se encuentran carretas en el Fortín de Areco, he pasado oficio
al Comandante de aquel puesto para que me proporcione catorce de ellas
ala hora también indicada al Alcalde.
El viento que corre aunque seco, me ha
permitido mandar tocar generala a las 4 y están batiendo las tiendas para
marchar.
A las cinco marchamos y llegamos a la
Cañada de Giles, al punto de ponerse el sol, se pasó lista, se rezó el
Rosario, y establecidas las carretas se levantaron las tiendas se cerró y
tocó a silencio después de la retreta, tuvimos un desertor anoche que venía de
Asistente del cirujano.
El agua de que bebemos es de una
Laguna, y de un pozo de balde que está en una casa inmediata; mucho gasto
hacemos en la manutención y vamos tardando demasiado; lo primero es
indispensable por que debe estar bien mantenido quien marcha a pie y pierde
tanto con el sudor; y lo segundo por el cansancio que trae la fatiga en la
estación y no es posible andar mucho.
San José y Salto. Victoria.
Día 31 de enero del año 1812.
A la 1 y 1 / 2 de la mañana se ha tocado
generala y salimos del Campamento a las 2 y 1 /2 para
aprovechar el fresco que corre y adelantar el camino cuanto sea posible; a las
6 llegamos a ese punto llamado Cañada de Suero; su agua es pésima, y la Casa
más inmediata está a 3/ 4 de legua de distancia sobre el costado derecho del camino.
Mandé ver si había pozo y
felizmente se encontró un manantial de agua regular a donde dispuse que fuera
un carro con los Almacenes de agua para llevar y traernos para proveer a la
tropa; en verdad que el agua es una de las cosas más trabajosas del camino para
la gente y también lo que puede contribuir a alterar su salud o traerle en lo
sucesivo consecuencias fatales a ella.
Los campos aunque son llanos empiezan ya
a manifestarse en lomas algo más altas; pero en tiempos de seca deben ser
intransitables por la tropa y compararse a los desiertos.
He mandado que se pase revista de chifle
esta tarde; asimismo he dispuesto que nos vengan a alcanzar las carretas que he
pedido a Areco, para adelantar los 100 hombres al Rosario y para igualmente
alcanzarlos con el resto lo más pronto; también se ha dispuesto en precaución
de que se recojan las bayonetas a las carretas; como esta gente no está
acostumbrada ni a la fatiga, ni al cuidado, es preciso tomar medidas que en
tros países serían ridículas; sufrirá 20 leguas a caballo y no puede andar 4 a
pie, sin grandes intermedios de descanso; por lo que hace al descuido es tan
propio de la educación que han tenido y del desprecio con que miran hasta
lo que le es más necesario para vestirse y cuanta otra incomodidad trae
consigo el ir con el pie desnudo.
Son las 4 de la tarde y aún no tengo
razón de las carretas pedidas, el sol está fuerte todavía; pero sin embargo he
mandad se traigan los bueyes y luego que lleguen, que se toque generala
para batir as tiendas y continuar la marcha hacia la Posta de Areco.
Se verificó la salida a las cinco y
llegamos al punto llamado de la Cañada del Señor Segundo a las 9 dadas de la
noche, bien que auxiliados del viento fresco; estas seis leguas que señala el
itinerario son ocho y las ha andado la tropa; pero ha ven ido fatigada y tengo
algunos enfermos.
He sabido que vienen 14 carretas del
Fortín de Areco y estarán mañana al amanecer en este puesto. Se tocó a silencio.
San Benito y Arrecifes. Adelante.
Día 1 de Febrero del año 1812.
A las cinco de la mañana han llegado 14
carretas que me envía el Comandante el Fortín de Areco, entre ellas cinco con
que auxilia gratuitamente el vecino de allí, Don Antonio Díaz, pagándose
únicamente los peones, en consecuencia he dado las órdenes para que la, 1, 2,
3, 4 y 6 Compañías marche a posesionarse del Rosario, conforme a la orden
del 29 del pasado, del Señor Jefe del Estado Mayor número tres y he dado el
mando al capitán de la última, Don Silvestre José Alvarez y la instrucción que
señala el número 2.
Se ha puesto la tropa en marcha a las 8
y queda el resto del Regimiento, para verificarla a la tarde, esta situación es
deplorable, las aguas pésimas, el campo pelado y el ganado muy flaco, nos han
donado cinco cabezas la esposa de Bergez de que le he dado certificación.
A la 5 de la tarde seguimos la marcha
dando un rodeo para poder pasar el río de Areco en paraje menos incómodo que el
que presenta el camino de la Posta; es muy pantanosa la Costa Oeste de este Río
y si alguno necesita un puente en la cuesta que hemos traído, es este; toda
especie de carruaje sufre mucho al pasar; se nos atolló una carreta
que nos
detuvo hora y media, y anduvimos hasta cerca de las 12 de la noche por terrenos
de bañado que en tiempo de lluvias ha de ser penosísimo su tránsito, y a esa
hora campamos a las inmediaciones de una laguna de muy mala agua.
Como las carretas ya me presentasen
capacidad, aunque incómodamente para conducir la tropa, y por otra parte la
fatiga de esga con los grandes calores de que ya tenía algún signo de
enfermedad no me permitiese hacer las marchas con la posible prontitud que se
requiere, según estoy persuadido por los antecedentes que tengo y noticias
vulgares que he oído, he dispuesto que suban a ellas para de este modo evitar que
haya más enfermos y conseguir el bien del servicio.
San Juan y Jujuy. Atención.
Día 2 de Febrero del año 1812.
Antes de la cinco de la mañana se tocó
generala y nos pusimos en marcha a las 6; se fueron algunos bueyes en la noche,
pero se remedió la falta con 4 que franqueó la viuda de Romero, y diez y seis
Don Andrés Castro; hicimos alto en la Posta de Lirio (Chacras de Ayala), a las
9 y 1 / 2 del día, allí se dio de comer a la gente y el descanso conveniente.
Los campos son llanos y están hermosos
con las lluvias; el pozo de la Posta nos ha surtido de agua que es muy buena, y
aunque no hay cardo seco alguno a los alrededores con algunos huesos y leña que
se ha traído del camino, se ha cocinado.
Así el Maestro de la Posta, como el
Comisionado del Partido Don Pedro Pablo Genes, se han esmerado en auxiliarme
con bueyes, con lo que se han devuelto los de la viuda de Romero.
A la 5 de la tarde se tocó generala y
marchamos hasta las 9 de la noche en que e hizo alto para dar descanso a
la tropa, y asimismo a los animales que se ataron a las ruedas para estar
prontos al salir la luna; luego que saló seguimos en camino y llegamos a la
Rivera de Arrecife a las dos de la mañana.
Como a la distancia de una legua al
Oeste del Río de Areco empieza a elevarse la tierra en lomas algo altas hasta
este punto; pero los caminos son excelentes, y tanto la infantería como la
artillería y caballería podrían operar muy bien en caso necesario y tomar muy
buenas posiciones ara situarse, bien que no para mucho tiempo sin proveerse de
lo necesario para vivir, pues los campos no tienen leña y aunque (tachado: son
escasísimos de agua), se podría remediar la escasez de agua haciendo pozos ya
se deja ver que esto no es bastante sino para lo más necesario”.
Santo Domingo y Quilmes. Energía.
Día 3 de febrero del año 1812.
Al rayar el día dimos principio al
pasaje del Río Arrecife, que por ser barrancoso por una y otra ribera presenta
algún cuidado en la operación; estaba a vado por consiguiente se facilitó más,
pero tardamos hasta las 8 y 1/ 2 de la mañana en pasar las 21 carretas, bien
que sin ningún perjuicio, seguimos por la Costa Oeste del Río hasta distancia
de un cuarto de legua del paso donde nos campamos a la orilla del Río e
inmediación de un manantial de excelente agua; se trajo el ganado y se
dispuso que todos lavasen sus ropas.
Los bueyes que traíamos de las Chacras
de Ayala se devolvieron y nos auxilió con 35 Don Enrique Sierra con toda
generosidad y 13 más que trajo el Oficial Comisionado de la Estancia de los
Bethlemitas sin embargo de que nos escribía el Padre Mayordomo Fray Juan de los
Dolores, alias, Llano que solo tenía 4 y estos inútiles.
Los puntos de defensa que presenta este
Río en la distancia que se ha recorrido, son más ventajosos de esta parte del
Oeste y sus alrededores,(sic), son de lomas mucho más elevadas que las de la
costa Este.
Cuando cesó el terrible ardor del sol
cerca de las 5 de la tarde nos pusimos en marcha presentando el tiempo el
aspecto de un gran temporal por el Oeste; pro llegamos como hasta distancia
de seis cuadras del pueblo, del Arrecife, cuando ya obscureció e hicimos alto
hasta que saliera la Luna,; entre tanto se levantó un fuerte viento del Sur
Este que refrescó bastante, despejó la atmósfera y así luego que brilló la Luna
seguimos nuestro camino en que estuvimos (tachado hasta la posta de Las
Fontezuelas), hasta las 7 de la mañana sin más novedad que haber encontrado a
Don Santiago Vázquez que venía del Ejército de los valientes de la Banda
Septentrional, de que nos dio buenas noticias”.
San Patricio y Buenos Aires. Libertad,
Día 4 de Febrero del año 1812.
A las 7 de la mañana llegamos a la Posa
de las Fontezuelas, y campamos; las aguas han favorecido estos terrenos y
están abundante de pastos, bien que, como todos escasos de leña, se proveyó de
carne a la gente y se determinó que
descansara, como también devolver la boyada de Sierra y Belermos; pero Don
Fernando Tavares franqueó 70 con la mayor generosidad, y lleno de
satisfacción por que se le proporcionaba esta ocasión de servir a la Patria.
De este punto sale el camino para el
Perú el que yo llevo que se llama el Del Medio y otro que se dirije hacia la
Costa del Paraná.
Todos son campos llanos con sus colinas
poco elevadas y están abundante de ganado; también se hallan poblados más que
los que dejamos desde el Puente de Marquez, y lo atribuyo a las más aguadas
permanentes que se encuentran con que se sostiene el proceso del ganado vacuno
y caballar.
El viento era fresco y proporcionó que
se tocara generala a las 1 y 1 /2 y a poco más de las dos de la tarde se
continuó la marcha hasta la Posta de Don Laureano Olmos a donde llegó la tropa
a las doce y minutos de la noche; se hizo alto hasta las dos y media de la
mañana.
El camino es muy bueno y solo se
encuentra el Arroyo Ramallo que aunque algo barrancoso como no lleva casi agua;
debiéndola como todos los de la carrera a las lluvias no presentó mayor
impedimento a su paso, y pocas veces podrá detenerlo.
El agua del pozo de la expresada Posta
es muy regular, leña si no hay la del cardo, se suple con huesos, o con la
bosta seca.
Dista este punto de la Costa del alto
Paraná por la parte más corta de diez a doce leguas”
San Liberto y el Alto. Unión.
Día 5 de Febrero del año 1812.
Desde las dos y media de la mañana hemos caminado hasta cerca de las 8, para
pasar el Arroyo del Medio a cuyas inmediaciones hemos campado y dispuesto se
traiga el ganado, la gua es salobre y leña no hay sino la de bosta seca, que proporciona
la multitud de ganado que cubre ambas riberas del Arroyo, en cuanto alcanza la
vista y venimos viendo desde que aclaró el día por uno y otro costado del
camino, de los que iban a beber.
Los campos que hemos corrido se elevan
en colinas suaves y están áridos por falta de lluvias.
La bajada para el arroyo empieza como a
distancia de media legua, está en pendiente muy cómoda y el paso del arroyo es
poco barrancoso y también de poco pantano; su salida tendrá igual
distancia hasta las tierras que se eleven con suavidad y sus pantanos no deben
ser muy incómodos aún en tiempo de muchas lluvias; aunque la tierra es gredosa
su fondo es de tosca suelta, como lo demuestra lo del indicado Arroyo.
El sol y el viento Norte que corre
nos ha abrazado, felizmente hemos tenido un corto alivio con el agua de
un pozo de la Casa que tenemos a la distancia de un cuarto de legua, es de las
buenas que hemos encontrado en el camino.
Se tocó generala a las 5 y 1 /2 de la
tarde y hemos andado por campos muy áridos hasta las doce de la noche que nos
acercamos al Arroyo Pabón.
Entre ocho y nueve de ella, me encontré
un soldado de Regimiento de Caballería de la Paria, con pliego de su Coronel
número,(en blanco),
Aunque el tiempo aparentaba gran
tormenta quedamos dispuestos a pasar el Arroyo luego que saliese la luna
San Vicente y Quilmes. Fraternidad.
Día 6 de febrero del año 1812.
Nos hallamos campados a la
inmediación del Arroyo Pabón, ya referido y son las ocho y tres cuartos de la
mañana; la tormenta que amenazaba descargó con grande huracán que nos echó por
tierra algunas tiendas; el agua ha sido abundante y fuerte, aún continúa ella y
el viento, bien que este no se ha fijado y ha corrido todos los puntos de la
aguja; esperamos que abonance un poco para emprender el paso del referido
Arroyo lo más pronto que sea posible, es bastante barrancoso y mayor la
elevación de los terrenos en su Costa Norte; el terreno que pisamos es muy
gredoso y desigual.
He contestado al Coronel del Regimiento
de Caballería de la Patria con el número,(en blanco).
Son las 10 y ½ de la mañana y recibo el
papel del Capitán de la 5ta. Don Silvestre Alvarez, número, (en blanco), a que
he contestado con el mismo número, (en blanco); El agua sigue pero parece que
el tiempo va a aclarar,
En efecto a las doce cambió el viento a
la parte del Oeste y nos dio tiempo para orearse la ropa y poder seguir
nuestro camino a las 3 de la tarde y verificamos el paso del Arroyo sin mayor
trabajo sin embargo de que es barrancoso y fangoso en sus orillas; continuamos
por terrenos muy llanos hasta el Arroyo Seco en donde campamos a las 9 de la
noche a las inmediaciones de la Casa de Doña María Gómez y otra cuyos pozos
aunque de agua bastante mala nos sirvieron para refrigerar la sed; se
dispuso quedasen los bueyes atados a las ruedas para marchar al salir la
luna, y sin más novedad se tocó a silencio.
Santa Catalina y Retiro. Concordia.
Día 7 de Febrero del año 1812.
A la una y media de la mañana se tocó
generala y marchamos por caminos y campos muy llanos, sin dificultad alguna y
con poco trabajo que se hizo en la barranca de salida de una Cañada que han
formado las aguas de lluvia, y llaman Saladillo, pasaron muy bien las carretas
y hallándonos a distancia del Rosario de cerca de una legua y se formó la
tropa, sacaron las banderas y con todo orden seguimos hasta este pueblo, cuyo
Comandante Capitán Moreno y el Alcalde con otros vecinos salieron a recibirnos
y ofrecérsenos.
Llegados a la Plaza Mayor se formó en
batalla y habiéndose depositado las banderas en la casa que me estaba
preparada, marchó la tropa al Campamento que ya estaba señalado por el
Capitán Alvarez en na buena situación cerca del Río y bajo unos árboles que
favorecen mucho por la estación en que nos hallamos.
El pueblo no tiene casas ni galpones
para colocar la gente; se ha encontrado una a propósito para parque de las
municiones que traemos y almacén de los vestuarios y además útiles
del Regimiento.
El Coronel y Oficiales de Caballería de
la Patria y el Capitán de Artillería , Herrera, como igualmente el Capitán
Rueda, encargado de la construcción de la Batería se me han presentado;
he tenido mis conferencias con los dos últimos, para la pronta conclusión de la
obra en la que me dicen se trabaja con bastante anhelo, sin embargo de la
falta de gente, y lo que es peor del dinero; pienso esta tarde ir a verlo todo
por mi mismo, a fin de tomar los conocimientos prácticos que se
requieren”.
(Aquí finaliza la relación manuscrita
del “Diario de Marcha” de Manuel Belgrano).
5.- En la Villa del Rosario.
Al día siguiente de llegada el 8 de Febrero
de 1812, el Coronel Manuel Belgrano, se ocupó de supervisar personalmente “los
trabajos que se realizaban en las baterías en construcción, del Rosario,
tras la ceremonia de recepción”. Le informan de Buenos Aires, “despachado el 3
de Febrero, la salida de varios carpinteros con el propósito de reforzar el
personal especializado que no debía abundar en la región”.
Belgrano responde: “desde la Posta de
Areco por la fatiga y los grandes calores el personal se iba enfermando,
continuamos el viaje en Carreta y a pie con cuanta celeridad ha sido posible”.
El General Bartolomé Mitre en la “Historia de Belgrano y la Independencia”, escribió: “el Ejército a su mando parecía una legión romana sujeta a las normas de una orden monacal”. (Edit. Anaconda. Reedición - 1950 -. Bs. As.).
El General Bartolomé Mitre en la “Historia de Belgrano y la Independencia”, escribió: “el Ejército a su mando parecía una legión romana sujeta a las normas de una orden monacal”. (Edit. Anaconda. Reedición - 1950 -. Bs. As.).
6 . - Bibliografía. Referencias:
1.-Mitre Bartolomé, Historia de Belgrano y de la Independencia Argentina. Cap. XVII. págs. 208 a 2014. Edit. Anaconda, Reedición. 1950- Bs. As.
2. .- De Marco Miguel Angel, Ensinck Oscar Luis, Historia de Rosario, Museo Histórico Provincial de Rosario, Dr. Juloio Marc, Cap. III, .- págs. 44 a 59. - Edit. Colmegna, Santa Fe, -1978,.
3.- Pérez Amuchástegui, Crónica Argentina, Tomo 1°, - págs. 328 a 332-. Edit. Códex, - Buenos Aires, - 1968-
3.- Pérez Amuchástegui, Crónica Argentina, Tomo 1°, - págs. 328 a 332-. Edit. Códex, - Buenos Aires, - 1968-
4.- - Vaccarezza, Silvio Roberto, (ex Pres. del Isntituto Belgraniano de Rosario), me facilitó fotocopias de Textos obtenidos de aquellas fotocopias que rescató Antonio Carrizzo (Locutor - Periodista) en un remate y autenticadas por la Academia Nacional de la Historia y la publicación del libro "El Diario de Marcha de Belgrano" publicado por el Inst. Nac. Belgraniano con anotaciones del Dr. Ernesto J. Fitte, y Prólogo del Prof. Aníbal Lusuriaga.- 1995.
5.- Bruno Cayetano.( SDB). "El ocaso Cristiano de los Próceres". Rosario. Didascalia .1988.-
6.- Furlong Guillermo. (S.J). "Belgrano el Santo de la Espada y de la Pluma". - Bs. As. - 1974.
7.- Consultas y entrevistas con Historiadores rosarinos: Agr. Juan Manuel Castagnino, (Ex Pres. del IBR). Dr. Tomasinii Freyre, Dr. Miguel Chiarpenello, Dr. Nardiello Víctor Hugo, sobre: "El Regimiento de Castas, de Pardos y Morenos,; de la Canción Patriótica de Esteban de Luca, coreada en el vivac, al grito de ¡Viva la Patria! y del Capitán Celedonio Escalada.
8.- Es un aporte a mis colegas docentes y amigos belgranianos, en este año del Bicentenario de la Independencia Nacional, (1816- 2016).
9.- Recopilador y autor de la ficha: Prof. Luis Angel Maggi. - Secretario del Instituto Belgraniano de Rosario. (07 de Junio 2016).6.- Furlong Guillermo. (S.J). "Belgrano el Santo de la Espada y de la Pluma". - Bs. As. - 1974.
7.- Consultas y entrevistas con Historiadores rosarinos: Agr. Juan Manuel Castagnino, (Ex Pres. del IBR). Dr. Tomasinii Freyre, Dr. Miguel Chiarpenello, Dr. Nardiello Víctor Hugo, sobre: "El Regimiento de Castas, de Pardos y Morenos,; de la Canción Patriótica de Esteban de Luca, coreada en el vivac, al grito de ¡Viva la Patria! y del Capitán Celedonio Escalada.
8.- Es un aporte a mis colegas docentes y amigos belgranianos, en este año del Bicentenario de la Independencia Nacional, (1816- 2016).
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