MERCEDES SAN MARTÍN DE BALCARCE:
La exquisita anfitriona de la Legación Argentina en París
por Roberto Colimodio
La exquisita anfitriona de la Legación Argentina en París
por Roberto Colimodio
El 24 de agosto, ante un nuevo aniversario del nacimiento de la “infanta mendocina” pretendo rescatar la etapa de su vida en que acompañó a su esposo Mariano Balcarce, Ministro Plenipotenciario de la República Argentina en París. Hijos devotos del General San Martín, junto a su marido desarrollaron la tarea diplomática de representación de los intereses argentinos en Europa.
Este aspecto de la personalidad de Mercedes no ha sido muy estudiado ni destacado por sus biógrafos, quedando su imagen acotada como hija, a quien San Martín dedicó las máximas, como esposa de Balcarce y madre de dos niñas. Gracias a escritos y recortes periodísticos de la época podemos reconstruir parcialmente la actividad desarrollada en Paris por Mercedes San Martín de Balcarce como anfitriona de las reuniones diplomáticas en París, en la Legación Argentina sita en la calle Berlín Nº 5 durante la década de 1860. Cumpliendo un destacado papel en la recaudación de fondos a través de cenas para ayudar a las víctimas y damnificados del terremoto en su ciudad natal, Mendoza del 20 de marzo de 1861.
Este aspecto de la personalidad de Mercedes no ha sido muy estudiado ni destacado por sus biógrafos, quedando su imagen acotada como hija, a quien San Martín dedicó las máximas, como esposa de Balcarce y madre de dos niñas. Gracias a escritos y recortes periodísticos de la época podemos reconstruir parcialmente la actividad desarrollada en Paris por Mercedes San Martín de Balcarce como anfitriona de las reuniones diplomáticas en París, en la Legación Argentina sita en la calle Berlín Nº 5 durante la década de 1860. Cumpliendo un destacado papel en la recaudación de fondos a través de cenas para ayudar a las víctimas y damnificados del terremoto en su ciudad natal, Mendoza del 20 de marzo de 1861.
Las reuniones:
Eduarda Mansilla de García (1834-1892) considerada la primer novelista argentina y dueña de talento musical y voz destacada frecuentó la Legación Argentina y nos dejó su testimonio, donde destacó la personalidad de sus amigos Mariano Balcarce y “Misia” Merceditas de la siguiente manera:
“En esa mansión de paz y confraternidad serán recibidos fraternalmente por un hombre de maneras afables y corteses que parece tener el don extraño de representar en su persona la patria madre con sus dulzuras y sin sus amarguras.
(Lo acompañaba) en los salones una mujer amable y distinguida, que poseía como nadie el talento de poner a son aise (a gusto/cómodo), a cuantos tenían la dicha de penetrar en aquel recinto. Doña Mercedes San Martín era por su cultura y distinción una notabilidad. Su trato, de una lady inglesa suavizado por la cortesía francesa, reunía ese no se qué sudamericano que se siente y no se explica.
Todos los que a ella se acercaron con intimidad, saben que su padre el General San Martín dirigió casi exclusivamente la educación de su hija amada y que ésta fue la compañera fiel y asidua del anciano hasta su hora postrera. Misia Merceditas, como los argentinos la llamábamos, no hablaba nunca de “tatita” sin que sus ojos se arrasaran de lágrimas. Bello modelo de piedad filial! Me parece verla secundada por la dulce Pepita y el distinguido señor D. Mariano Balcarce, hacer con sencillez encantadora los honores de esos salones suntuosos, en donde el arte y el buen gusto han coleccionado tantas bellezas.”
La Legación Argentina era el punto de reunión de lo más escogido de la colonia americana y en las noches diplomáticas de lo más encumbrado que reúne París. Su salón adornado con copias magistrales de los mejores cuadros del mundo y con obras de Mercedes, eximia artista. En un costado del salón, “EL RETRATO”, representando a un hombre de más de 35 años, de tez morena, nariz ligeramente aguileña y ojos negros centellantes, con un fondo de pliegues del estandarte azul y blanco y una rama de laurel. El General San Martín retratado por su hija, la artista amorosa ha logrado estampar en el lienzo los rasgos característicos del héroe. Aquellos ojos lanzan rayos y en la frente luminosa aparece la majestad del triunfo y del sufrimiento.
Debo a esa familia modelo, que fue para mí y mis hijos un centro cariñoso”.
La actividad de la familia Balcarce se replicaba en los periódicos parisinos en especial en “Le Memorial Diplomatic” que resaltaba en 1867 que la Legación Argentina era la más distinguida y cómoda de todo el cuerpo diplomático extranjero y que “está organizada con un gusto artístico que recuerda las casas de los ricos señores italianos y atestigua que la dueña del lugar cultiva las bellas artes con amor y éxito”.
Eduarda Mansilla de García (1834-1892) considerada la primer novelista argentina y dueña de talento musical y voz destacada frecuentó la Legación Argentina y nos dejó su testimonio, donde destacó la personalidad de sus amigos Mariano Balcarce y “Misia” Merceditas de la siguiente manera:
“En esa mansión de paz y confraternidad serán recibidos fraternalmente por un hombre de maneras afables y corteses que parece tener el don extraño de representar en su persona la patria madre con sus dulzuras y sin sus amarguras.
(Lo acompañaba) en los salones una mujer amable y distinguida, que poseía como nadie el talento de poner a son aise (a gusto/cómodo), a cuantos tenían la dicha de penetrar en aquel recinto. Doña Mercedes San Martín era por su cultura y distinción una notabilidad. Su trato, de una lady inglesa suavizado por la cortesía francesa, reunía ese no se qué sudamericano que se siente y no se explica.
Todos los que a ella se acercaron con intimidad, saben que su padre el General San Martín dirigió casi exclusivamente la educación de su hija amada y que ésta fue la compañera fiel y asidua del anciano hasta su hora postrera. Misia Merceditas, como los argentinos la llamábamos, no hablaba nunca de “tatita” sin que sus ojos se arrasaran de lágrimas. Bello modelo de piedad filial! Me parece verla secundada por la dulce Pepita y el distinguido señor D. Mariano Balcarce, hacer con sencillez encantadora los honores de esos salones suntuosos, en donde el arte y el buen gusto han coleccionado tantas bellezas.”
La Legación Argentina era el punto de reunión de lo más escogido de la colonia americana y en las noches diplomáticas de lo más encumbrado que reúne París. Su salón adornado con copias magistrales de los mejores cuadros del mundo y con obras de Mercedes, eximia artista. En un costado del salón, “EL RETRATO”, representando a un hombre de más de 35 años, de tez morena, nariz ligeramente aguileña y ojos negros centellantes, con un fondo de pliegues del estandarte azul y blanco y una rama de laurel. El General San Martín retratado por su hija, la artista amorosa ha logrado estampar en el lienzo los rasgos característicos del héroe. Aquellos ojos lanzan rayos y en la frente luminosa aparece la majestad del triunfo y del sufrimiento.
Debo a esa familia modelo, que fue para mí y mis hijos un centro cariñoso”.
La actividad de la familia Balcarce se replicaba en los periódicos parisinos en especial en “Le Memorial Diplomatic” que resaltaba en 1867 que la Legación Argentina era la más distinguida y cómoda de todo el cuerpo diplomático extranjero y que “está organizada con un gusto artístico que recuerda las casas de los ricos señores italianos y atestigua que la dueña del lugar cultiva las bellas artes con amor y éxito”.
Mercedes en Londres junto a la Reina Victoria (1867):
Ese mismo año, la familia Balcarce viajó a Londres a un acontecimiento muy especial, presentarse ante la Reina de Inglaterra, precisamente: “Al círculo de la Reina Victoria que se efectuó, el 27 de febrero en el palacio de Buckingham, la señora Balcarce fue presentada a Su Majestad por la condesa de Derby, y luego ella misma presentó a la señora Gutiérrez de Estrada, su hija , casada con el Sr. Gutiérrez de Estrada, antiguo secretario de legación de México, que ha sido presentado a su vuelta a la Reina por el Sr. Balcarce”.
Los viaje a Londres eran frecuentes, como lo consignan varias fuentes periodísticas y el hecho que el grupo familiar fuera censado en 1871 con residencia en dicha ciudad. Estos viajes duraban algunas semanas.
Ese mismo año, la familia Balcarce viajó a Londres a un acontecimiento muy especial, presentarse ante la Reina de Inglaterra, precisamente: “Al círculo de la Reina Victoria que se efectuó, el 27 de febrero en el palacio de Buckingham, la señora Balcarce fue presentada a Su Majestad por la condesa de Derby, y luego ella misma presentó a la señora Gutiérrez de Estrada, su hija , casada con el Sr. Gutiérrez de Estrada, antiguo secretario de legación de México, que ha sido presentado a su vuelta a la Reina por el Sr. Balcarce”.
Los viaje a Londres eran frecuentes, como lo consignan varias fuentes periodísticas y el hecho que el grupo familiar fuera censado en 1871 con residencia en dicha ciudad. Estos viajes duraban algunas semanas.
Los banquetes:
Algunas de las veladas en calle Berlín fueron narradas por el periodismo destacando las cenas servidas con espléndido lujo, la presencia de damas elegantes –esposas e hijas de diplomáticos- destacando los honores de Madame Balcarce y su hija, quienes con su cordial amabilidad otorgaban a estas reuniones el encanto de una celebración familiar. Después de la cena, continuaba la reunión con charlas intimistas hasta casi la medianoche, matizadas con la voz de Eduarda Mansilla interpretando melodías italianas al piano en el Salón Cuadrado.
Algunas de las veladas en calle Berlín fueron narradas por el periodismo destacando las cenas servidas con espléndido lujo, la presencia de damas elegantes –esposas e hijas de diplomáticos- destacando los honores de Madame Balcarce y su hija, quienes con su cordial amabilidad otorgaban a estas reuniones el encanto de una celebración familiar. Después de la cena, continuaba la reunión con charlas intimistas hasta casi la medianoche, matizadas con la voz de Eduarda Mansilla interpretando melodías italianas al piano en el Salón Cuadrado.
Madrina de un barco (1873):
En mayo de 1873, Mercedes San Martín de Balcarce, tuvo el honor de cortar la cuerda “que mantenía inmóvil al coloso”, el vapor trasatlántico a hélice de vapor “San Martín” cuya botadura se realizó en el puerto de Le Havre. Esta fue una de las últimas apariciones públicas de Mercedes quien falleció el 28 de febrero de 1875 en su finca de Brunoy.
Fiel y devota hija, mujer de cultura y modales distinguidos por la sociedad, amante esposa y madre, supo desempeñar con creces el legado sanmartiniano de su “Tatita”.
(Cfr. Tenemos ejemplos. Difusión para docentes y alumnos. Prof. Luis Angel Maggi).
En mayo de 1873, Mercedes San Martín de Balcarce, tuvo el honor de cortar la cuerda “que mantenía inmóvil al coloso”, el vapor trasatlántico a hélice de vapor “San Martín” cuya botadura se realizó en el puerto de Le Havre. Esta fue una de las últimas apariciones públicas de Mercedes quien falleció el 28 de febrero de 1875 en su finca de Brunoy.
Fiel y devota hija, mujer de cultura y modales distinguidos por la sociedad, amante esposa y madre, supo desempeñar con creces el legado sanmartiniano de su “Tatita”.
(Cfr. Tenemos ejemplos. Difusión para docentes y alumnos. Prof. Luis Angel Maggi).
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